Ecoembes quiere generalizar un sistema basado en los smartphones y la tecnología móvil para compensar a los consumidores por reciclar sus envases -de forma individual y colectiva-, tras haberlo probado con éxito en varios proyectos piloto en Cataluña. La entidad quiere extender el modelo, denominado Reciclos, a Baleares, Castilla-La Mancha, Galicia, La Rioja, Madrid, Murcia, País Vasco y Valencia.
Ecoembes inauguró el proyecto Reciclos en abril del año pasado. Con el apoyo de la Generalitat de Cataluña, empezó a aplicarse en los municipios de Igualada, Granollers, Sant Boi de Llobregat y la comarca de Pla de l´Estany; también en las universidades Politécnica de Catalunya y la Rovira y Virgili, y en Hospital Germans Trias i Pujol.
Para cada uno de estos emplazamientos se diseñó una aplicación para teléfonos móviles (App) en la que se ha registrado todo aquel que ha querido participar. Usando esta App, los consumidores han fotografiado los códigos de barras de los envases -botellas, latas y tetrabricks-, antes de depositarlos en los contenedores municipales amarillos o en las papeleras de las universidades y el hospital.
Ni los contenedores ni las papeleras son normales. La organización dirigida por Óscar Martín los identificó con códigos QR, de modo que, al depositar el envase, el ciudadano lo escanea y lo registra en la App, recibiendo a cambio unos puntos canjeables denominados Reciclos.
Incentivos no dinerarios
Estos Reciclos se pueden convertir en un producto o un servicio con efecto positivo en el medio ambiente o en la sociedad, que varían en cada uno de los casos; la idea de Ecoembes es que sean incentivos que fomenten la sostenibilidad y hasta el momento se ha excluido la compensación dineraria.
Hasta ahora se han aplicado dos tipos de fórmula para canjear los Reciclos, individual y colectiva, y ha variado en cada uno de los casos. Con la modalidad individual, los Reciclos se han transformado en participaciones para sorteos de productos ecológicos, como cosméticos o bicicletas eléctricas; con la colectiva, se han convertido en donaciones a ONG como Médicos sin Fronteras, en la construcción de una fuente pública o en la compra de un centenar de juguetes para niños con pocos recursos durante las pasadas navidades.
Unos 5.000 usuarios
Hasta el pasado mes de diciembre, en los proyectos piloto habían participado unos 5.000 usuarios, que han generado unos 105.000 Reciclos, muchos de los cuales no se han llegado a canjear; por ejemplo, sólo se han repartido una bicicleta y un patín eléctricos.
Sin embargo, el sistema funciona -Martín lo califica de "revolución completa del reciclaje"- y Ecoembes ya tiene planes para extenderlo a las ocho comunidades autónomas citadas, aunque aún no se atreve a facilitar fechas para ello. Las administraciones están muy interesadas, pero su implantación es compleja y depende de condiciones variables, como las tasas de basura municipales.