
El sector de la construcción recibe otro golpe. Tras el preconcurso de Tilmon a finales del pasado mes de enero y es ahora Byco (antigua Inbisa Construcción) la que anuncia que ha solicitado la declaración de concurso voluntario de acreedores.
Concretamente, la compañía vasca presentó esta solicitud de concurso el pasado 3 de febrero ante los Juzgados de lo Mercantil de Bilbao. Byco se separó de Inbisa y depende ahora de Grupo Inberalia, si bien, ambas sociedades están participadas por Jesús González Moro.
La firma ha llegado a esta situación tras dos años en los que los costes de la mano de obra y los precios de los materiales de construcción han crecido a ritmo de dos dígitos, lo que ha reducido notablemente sus margenes.
La firma trabaja para Inbisa y para otras promotoras como Neinor, Q21 Real Estate o Solvia Development
"Dicha solicitud viene motivada por las dificultades previstas para atender próximos vencimientos, aunque hasta la fecha se encuentra al corriente en el pago de todas sus obligaciones con proveedores, empleados y administraciones públicas", explica la compañía en una nota.
Byco, que construye principalmente para la promotora Inbisa, apunta que "cuenta con diversas obras en curso para cuya continuidad se está preparando un plan que contemple la garantía de pagos de obra a ejecutar a proveedores y el cumplimiento de los compromisos adquiridos con clientes". La firma trabaja también para otras promotoras como Neinor, Q21 Real Estate o Solvia Development.
Asimismo está "en proceso de valorar la presentación a corto plazo de una propuesta de Convenio Anticipado para el pago de la deuda junto con un Plan de Viabilidad de la empresa basado en una reestructuración de la misma y de la reorientación del negocio a una actividad más centrada en la especialización en obra no residencial así como en la Proyección Técnica y control y monitorización de obras en base al conocimiento y experiencia de sus equipos".
La compañía, que cuenta con cuatro delegaciones (Vizcaya, Madrid, Málaga y Barcelona), asegura que tiene interés y voluntad de minimizar el efecto de la actual situación y apunta que esta está provocada por "en gran medida por la crisis generalizada en el sector, que viene afectando igualmente a importantes empresas en los últimos meses por la reducción drástica de márgenes, el encarecimiento de costes y la conflictividad en los desarrollos y liquidaciones económicas de ciertas obras".
Según los resultados de la empresa al cierre de 2018 registró unas pérdidas de 3,3 millones de euros, frente a un resultado positivo de 3,7 millones en 2017. Según sus cuentas, la contratación de obras de la firma cayó ese año un 35%.