Los principales directivos del sector gasista español han solicitado a la Comisión Nacional de los mercados y la Competencia seguridad jurídica a través de una regulación que sea coherente y que establezca una retribución adecuada durante toda la vida útil de las empresas del sector.
Así lo han apuntado durante sus intervenciones en el IV Foro Anual de Energía, organizado por elEconomista y patrocinado por EY, Naturgy, Ence, Redexis, Siemens Gamesa, Gesternova, Viesgo, Aldro, Engie, BP y Home Serve, en el que han debatido sobre el futuro del sector en relación a la propuesta que presentó el regulador hace dos meses para recortar la retribución que deben recibir las empresas gasistas.
Antonio Llardén, presidente de Enagás, apuntó que lo "fundamental de la nueva regulación es que sea coherente y que permita cumplir con los objetivos medioambientales que se marcan desde la Unión Europea". Así, el directivo destacó que es muy importante que el nuevo modelo "permita que el sistema funcione con costes muy eficientes y sea capaz de asegurar la estabilidad económica y empresarial de los operadores gasistas".
"En este momento es obvio que la regulación debería ser la consecuencia de unos objetivos que se están discutiendo no solo en España, también en Europa", explicó Llardén, que aprovechó su intervención para apuntar que la "regulación del año 2014, que tenía el objetivo de evitar el desequilibrio del sistema gasista, ha sido la correcta".
Asimismo, el presidente de Enagás puso en valor el papel "muy importante que va a jugar el gas en nuestro país", en una transición que además de ser "eficiente en tiempo y coste, debería ser socialmente justa".
La transición energética debe ser eficiente en tiempo y coste y socialmente justa
Por su parte, Nuria Rodríguez, consejera delegada de Nedgia, destacó que "en los últimos 20 años podemos decir que ha sido un modelo regulatorio hecho entre todos los agentes y ha sido un modelo de éxito. Los clientes se han duplicado y el precio del gas ha sido competitivo. Se han hecho miles de millones de inversión que han creado empleo en las zonas donde el gas has estado presente y el sector mueve una economía anexa muy relevante de 150. 000 empleos en España".
Así, la directiva apuntó que esperan que "en esta nueva etapa el regulador nos perita afrontar los retos de la transición energética con una rentabilidad razonable para los inversores y con precios competitivos para los usuarios, ya que nuestra energía no es esencial. Tiene alternativas a las que el usuario puede acceder".
Rodríguez cree que estos factores son claves para "no poner en riesgo los objetivos de descarbonización, hacer una transición justa y no equivocarnos como país"
Por su parte, Conrado Navarro, presidente de Nortegas destaco que "durante los últimos años han entrado fondos de pensiones buscando estabilidad y una rentabilidad razonable a largo plazo. Son fondos que vienen para quedarse y están esperando a poder entrar en este periodo de diez años que será clave para ver como llegaremos al año 2050".
"En este proceso tenemos circulares, informes de las administraciones y alegaciones de las compañías, por lo que creo que seremos capaces de llegar a una definición de los sistemas retributivos que incentiven la inversión extranjera, el crecimiento de las redes y nos lleven a tener un país que inspire confianza al inversor".
Piden agilidad y un marco estable
Fernando Bergasa, presidente de Redexis, destacó que "el futuro ya está aquí". Por lo que lanzo un mensaje al regulador: "no hay tanto tiempo para hacer esa reflexión y para crear incentivos para que España vaya al mismo ritmo que las grandes economías del mundo".
Así, cree que sería "una tragedia que nuestro país que siempre ha ido liderando en este mercado, pierda ahora un tren que ya está saliendo de la estación".
"Hay urgencia por definir incentivos para que se desarrolle toda la transición energética y estos deben incluir a las redes como elemento esencial ya que en los últimos años se han hecho en España inversiones enormes para que estas sean el vehículo optimo para transportar gas de cero emisiones o hidrógeno" apuntó Bergasa.
Además, el presidente de Redexis anunció que desde la compañía tienen 60 millones de euros comprometidos para invertir en hidrógeno y están buscando "las oportunidades concretas".
El presidente de Nortegas, Conrado Navarro, aprovechó su intervención para poner sobre la mesa la necesidad de un marco legal claro y una remuneración estable, ya que las redes "son inversiones a 40 años vista". Así, destacó que la nueva regulación debería tener en cuenta a los grandes fondos de inversión que quieren financiar las redes y que buscan una rentabilidad a largo plazo. "Ahora mismo están esperando el resultado de esta nueva regulación", aseguró.
Según el directivo, para 2030 "están previstas unas inversiones por volumen de 235.000 millones de euros que van a venir del exterior básicamente y para hacer atractivas esas inversiones es necesaria una estabilidad regulatoria y generar confianza".
Importancia del petróleo
Por su parte, José Luis López de Silanes, presidente de CLH, defendió el papel del petróleo, que es ahora "el patito feo", pero "va a jugar un papel muy importante en la transacción".
Según el directivo el 85% del transporte se hará con petróleo en el año 2030.
"En España el punto más alto de consumo fue antes de la crisis, en 2007. Después cayo un 20 por ciento y ya hemos recuperado 15 puntos. Llegará un momento que empezaremos a declinar el consumo debido a las nuevas regulaciones que se están implantando para el cambio climático, y también de una forma muy importante la reducción vendrá por las eficiencias que se consiguen en los motores de combustión ya que los fabricantes hacen grandes esfuerzos de i+d", explicó López de Silanes.
El presidente de CLH destacó que el "combustible líquido es muy flexible y por unidad de volumen almacena una gran cantidad de energía. Además, se puede almacenar y transportar muy bien y hay una infraestructuras desarrollada en España muy potente". De hecho, apuntó que según la Agencia Nacional de la Energía, en España tenemos las redes más eficientes y flexibles del mundo. Concretamente, "de los 130 céntimos que vale un litro de gasoil en la estación, menos de un céntimo es el coste logístico", asegura.
El directivo anunció además que desde CLH "vamos a seguir expandiéndonos. Estamos en los aeropuertos de Dublin y de Panamá y estamos terminado una negociación para entrar en Ecuador". Esta es "una línea que vamos a trabajar ya que solo el combustible líquido es capaz de hacer despegar un avión". Además, la compañía está "estudiando como usar las redes para productos alternativos y queremos meternos en distribución de productos químicos en España y a nivel internacional".
Avances de la tecnología
Victor M. Pérez, MED & Spain Energy Leades de EY, destacó los cambios tecnológicos exponenciales a los que se enfrentan las redes energéticas. "Estos consiguen situar el coste a la mitad o al doble en ciclos sucesivos en la mitad del tiempo", detalló el experto, que apuntó que hay tres cambios principales en este sentido.
"El primero tienen que ver con una serie de tecnologías renovables que van a conseguir suceder varias tecnologías de almacenamiento y algunas que acabarán por surgir por que la sociedad lo demandara. El segundo es el poder de computación. Ya estamos todos en ciclos de duplicarlo en 18 meses", señaló Pérez.
El tercero son las "telecomunicaciones y la capacidad de transferir datos en menos tiempo. Estos tres cambios van a evolucionar profundamente en los próximos diez años y son cambios y evoluciones tecnológicas que no podemos parar".
"Nosotros no vamos a entrar en decirle al regulador lo que tienen que hacer, pero si en lo que tienen que tener en cuenta", señaló el experto. "En los próximos diez años nos jugamos que redes muy robustas que se están adaptando a la transición sean capaces de adaptarse a estas tecnologías para las nuevas funcionalidades que demandan los clientes, por lo que no tenemos que aislarnos de lo que pasa en el resto del mundo. Dada la incertidumbre de como se van a abordar esas tecnologías debe dedicarse tiempo al debate y la reflexión por parte del regulador".