
Renfe afronta la llegada de la competencia al AVE con la filial de viajeros en niveles récord pese a no cumplir con las previsiones de ingresos y de actividad por los retrasos en la inauguración de corredores y la falta de trenes para aumentar la oferta, entre otras cosas.
Así, el negocio del transporte de pasajeros hila más de cinco años al alza gracias, sobre todo, al aumento de la demanda de los servicios comerciales, y tira de los resultados del grupo, que en el primer semestre del año ha ganado un 35% más pese a que la división de Mercancías y la de Fabricación y Mantenimiento están en pérdidas.
La filial de Viajeros ha facturado 1.791 millones entre enero y junio, un 3,7% más, y dispara el ebitda
Según los últimos datos publicados por la empresa que preside Isaías Taboas, la filial de Viajeros ha facturado 1.791 millones de euros entre enero y junio, un 3,7% más que en el primer semestre de 2018 y ha logrado un ebitda de 231 millones, un 5,8% más. El resultado neto roza los 44 millones de euros, lo que implica un alza del 23,8%. Aunque los ingresos están un 1,7% por debajo de lo presupuestado por la cúpula, lo cierto es que los gastos también han sido inferiores a lo esperado pese al aumento del 2,45% de la demanda (la ocupación de los trenes sigue al alza) lo que ha llevado al negocio a ganar casi tres veces más de lo previsto (los datos no recogen la apertura del AVE a Granada, trayecto para el que ya ha vendido más de 100.000 billetes).
En esta línea, y conforme aumenta la actividad y la ocupación del AVE, que ya supera el 75%, la división de viajeros ha mejorado los ingresos y la actividad en los últimos años pasando de registrar unos 430,6 millones de 2016 a uno de 491,7 millones en 2018.
Según los últimos datos publicados por el INE, la alta velocidad ha transportado 9.049.000 pasajeros entre enero y mayo de 2019, lo que implica un alza del 4% con respecto al mismo periodo de 2018 y del 16,4% frente a 2015, el primer año en el que el INE publica datos del AVE.
Fuentes de Renfe aseguran que el crecimiento del servicio se ralentizó ya en 2017 por la falta de capacidad. Por ello, y ante la apertura de nuevos corredores, el gestor compró 30 trenes de alta velocidad y alta capacidad a Talgo, que empezará a recibir en 2021, y ha ordenado la conversión de trenes cama en AVE y la reducción de la clase business en otros modelos para aumentar su oferta de cara a la llegada de la competencia y satisfacer demanda. A su vez, ha ordenado quitar la cafetería y aumentar las plazas en cinco trenes de la serie 112 para lanzar el servicio de bajo coste en Semana Santa de 2020, seis meses antes de que circule por España la competencia.
El Norte, el que más crece
El plan del grupo es empezar a operar con este servicio en el corredor Madrid-Barcelona, que es el que más demanda tiene. Según los datos de Renfe, los servicios comerciales del Nordeste movieron 8,18 millones de pasajeros en 2018, un 0,3% menos que en 2017, pero generaron unos ingresos de 492 millones de euros, un 1,4% más. Así, solo esa zona, en la que principalmente opera el AVE, aporta el 33% de los ingresos comerciales de la filial de viajeros.
La segunda zona con más actividad es la Sur (tráficos a Andalucía) con 7,7 millones de pasajeros, un 5,2% más que en 2017, y unos ingresos generados del 367 millones, un 4,8% más. Los servicios comerciales de la zona Este, donde también reina el AVE, movieron 5,7 millones de pasajeros en 2018, un 6% más, y 230 millones de ingresos, el 6,3% más. El Norte crece a ritmo del 11% a los 4,7 millones de viajeros. En total, los servicios comerciales movieron 33,6 millones de viajeros, el 64,4% en AVE, y generaron 1.465 millones de euros de ingresos, un 3,7% más.