Renfe se ha puesto manos a la obra para dar un giro de 180 grados a su página web ante el desembarco de la competencia en 2021 y el lanzamiento de su servicio de bajo coste en semana santa de 2020 sin cafetería ni bussines.
El operador ferroviario, que lleva años recibiendo críticas sobre el funcionamiento de su portal de venta de billetes, ha decidido invertir hasta 2,5 millones de euros (IVA incluido) en "mejorar la experiencia digital de sus clientes" mediante la puesta en marcha de varios proyectos para potenciar la gestión de contenidos, la personalización y el carácter internacional de la misma.
La web tendrá una nueva apariencia y estructura de contenidos
Así, el plan elabora por la compañía que preside Isaías Taboas persigue hasta siete objetivos centrados en crear una página web más sencilla, ágil y con una versión especial para el móvil, que es el dispositivo que más se usa actualmente para realizar cualquier tipo de actividad. En concreto, el nuevo portal tendrá que tener "una nueva apariencia" y una "nueva estructurara de contenidos más sencilla y accesible" así como "capacidades de personalización online para cada grupo o segmento de clientes".
Entre los objetivos también destaca que la web tenga capacidades de multidioma (actualmente está en inglés, español, francés, italiano, catalán, euskera y gallego) y que tenga un mejora posicionamiento en buscadores. Éste último punto es muy importante ya que el objetivo de Taboas es que Renfe se posiciones en todos los segmentos del negocio del transporte y no limitarse a ser un proveedor de servicios en un mundo dominado por las grandes webs de viajes. Así, la compañía quiere tener una gran web que, más allá de billetes de tren, le permita vender viajes integrados puerta a puerta, servicios extra y hasta contratar hoteles o coches alquilarlos. Algo así como su Amadeus o Amazon de los viajes.
Busca adelantarse a los retos y posicionarse en la gestión de datos y el trato al cliente
En este punto, el presidente de Renfe ya ha anunciado que en otoño estará operativa la plataforma digital de Renfe en la que además de comprar el billete de la operadora ferroviaria, se podrán contratar de forma integrada los servicios de taxi, Cabify y los billetes de las lineas de transporte público de Madrid y Barcelona. Asimismo señaló que la "disrrupción tecnológica" era uno de los grandes retos que afronta el sector tras la liberalización por lo que Renfe está apostando por la digitalización y la inversión I+D para adelantarse tecnológicamente a los retos y posicionarse en la gestión de datos y el trato al cliente.
Además del contrato de rediseño y potenciación de la página web, que tiene una duración de 34 meses, el operador ha lanzado una licitación para contratar un servicio de mantenimiento, soporte y gestión y solución de crisis por ocho millones de euros para evitar que se quede colgada la página o que deje funcionar cuando hay una gran afluencia.