
El Corte Inglés ha confirmado lo que era una evidencia en el sector: que no tiene nada que ver con la operativa o el futuro de Iberia pese a poseer, a través de Garanair, el 51% de las acciones de la aerolínea. "La sociedad dominante (El Corte Inglés) considera que no ostenta el control sobre IB Opco (la matriz de Iberia)", reconoce los grandes almacenes en un apunte de sus cuentas de 2018 recogido por El País.
La confesión de la compañía que preside Marta Álvarez viene a dejar públicamente sola a línea aérea en su plan para demostrar a la UE que sigue siendo una aerolínea española o comunitaria en caso de Brexit duro, pero en esencia no cambia nada ya que es una realidad que se conocía desde el principio.
La confesión de El Corte Inglés no cambia nada en esencia porque la UE ya rechazó el plan
Y es que, tener la propiedad o los derechos políticos mayoritariamente en manos españolas no es suficiente para que la Comisión Europea (CE) considere a una aerolínea comunitaria y, en más de una ocasión, ha recordado a Iberia y su matriz, IAG, que el control efectivos y económico de la aerolínea es lo que tiene que estar, en más de un 50%, en manos de inversores comunitarios, algo que no pasaría en caso de que Reino Unido abandone la UE.
"El grupo posee el 49,9% del capital social nominal total y el número total de derechos de voto en IB Opco Holding u casi el 100% de los derechos económicos"
En este punto, la propia IAG ha reconocido en más de una ocasión, el control y el futuro de Iberia está sus manos y El Corte Inglés no tiene ni voz ni voto. "El grupo posee el 49,9% del capital social nominal total y el número total de derechos de voto en IB Opco Holding, S.L. (y así, indirectamente, en Iberia Líneas Aéreas de España, S.A. Operadora), dicha participación tiene casi el 100% de los derechos económicos de estas empresas", reconoce el holding que dirige Willie Walsh en un apunte en las cuentas anuales de 2018.
El 50,1% restante lo tiene el Corte Inglés a través de Garanair, que es la empresa que se constituyó "a efectos de implementar la estructura de accionarial de Iberia", explica la dueña de British Airways y Aer Lingus.
En el caso de Vueling, cuya europeidad también estaría en el aire tras un Brexit sin acuerdo, la carta de Garanair no se ha llegado a jugar porque Iberia tiene una participación del 45,8% en la aerolínea catalana mientras que IAG tiene el 53,6% a través de Veloz Holdco. El holding aéreo ya ha prohibido a los accionistas no europeos comprar más títulos de la compañía, lo que ha afectado a su cotización.
El 52,5% de su capital está actualmente en manos de inversores de la UE pero estos incluyen a los accionistas de Reino Unido, que pueden perder esa categoría si no se reconduce la situación. Así, en febrero Bruselas dio un plazo de siete meses a IAG para que modificara su estructura de capital para seguir siendo europea y beneficiarse del acuerdo de cielos abiertos que permite volar a cualquier destino desde cualquier país dentro de la unión.
El 50,6% de los accionistas de easyJet ya está en manos de nacionales europeos no británicos
Una medida que ya tomado easyJet, que ya tiene un 50,6% de su propiedad en manos de nacionales europeos (sin contar el Reino Unido) en su estrategia de prepararse ante un posible Brexit.
Para IAG la certificación de que El Corte Inglés no controla Iberia no cambia nada y recuerdan que "el gobierno español ha confirmado que los planes de nuestras aerolíneas en caso de un Brexit sin acuerdo cumplen con la normativa aplicable sobre propiedad y control de la Unión Europea". A su vez, Willie Walsh ha asegurado en más de una ocasión que la compañía está prepara para seguir volando sin problemas. De todas formas la Bruselas es la que tendrá una de las últimas palabras.