
Es complicado calcular el número de falsos autónomos que hay en España. Las cifras oscilan entre los 200.000 que calcula Uatae o los algo menos de 100.000 que estima ATA. "El que haya falsos autónomos es un problema, un fraude de ley y hay que combatirlo", aseguraba Lorenzo Amor, presidente de este organismo, la pasada semana.
Pero, ¿cómo se puede acabar con esta figura? ¿Qué medidas se pueden dar? Alicia Carrascal, colaboradora de Easyoffer, apunta cuáles son los pasos legales que debe dar un trabajador en esta situación para acabar con este fraude.
"Hay que denunciar la situación ante la Inspección de Trabajo y nunca abandonar la empresa hasta que se haga la denuncia. Una vez acreditado el fraude por esa Inspección el empresario podría solicitar un acuerdo extrajudicial. El siguiente paso es ir a una demanda judicial", explica la experta.
El problema es que, en muchas ocasiones, el trabajador no lleva a cabo la denuncia por miedo a posibles represalias. "Hay que tener en cuenta que la denuncia ante Inspección de Trabajo es totalmente anónima", recuerda Carrascal. Sin embargo, en las empresas más pequeñas, es fácil descubrir quién es la persona que ha puesto la denuncia, sobre todo cuando el conflicto viene de atrás.
Interés personal
No es el único motivo que puede llevar a un trabajador a no tomar ninguna medida contra esta situación. En ocasiones, el propio trabajador tiene un interés personal en mantener esta relación con la empresa, "al cobrar una serie de ayudas que hacen que no le compense estar contratado", apunta la experta.
No ven el problema hasta el momento en el que el trabajador es despedido. "Es en el momento de cobrar una indemnización cuando uno es consciente de la parte negativa de ser falso autónomo", concluye Carrascal.