
Cada minuto se generan en Internet miles de millones de datos: tuits, búsquedas de Google, entradas en Facebook, vídeos de Youtube... Las empresas reciben una cantidad ingente de información a diario que necesitan estructurar y analizar para poder aprovecharlas en su beneficio. Por ello, el perfil profesional de analista de datos se ha convertido en uno de los más solicitados.
"La gran cantidad de datos que 'circulan' por el mundo es difícil de controlar y mucho más difícil es extraer conclusiones acertadas sobre los mismos", explica Sonia García Fernández, manager del área de Big Data de la consultora tecnológica VASS. Para dar una solución a este asunto ha surgido el Big Data, entendido como la gestión y análisis de grandes cantidades de información que puede o no estar estructurada.
La conversión de estos datos en información útil facilita la toma de decisiones en las empresas. Por este motivo el Big Data se presenta como una oportunidad de negocio que ayuda a entender mejor a los clientes respecto a los productos o servicios que se les ofrece. Otra de las ventajas es que permite analizar la información procedente de diferentes fuentes como las redes sociales, los dispositivos electrónicos, los sensores de movimiento etc.
Rapidez
La velocidad es otro de sus puntos fuertes, ya que las soluciones Big Data permiten recibir y procesar los datos con rapidez, lo que agiliza la toma de decisiones. Este ahorro de tiempo no tiene consecuencias negativas en la veracidad y el valor de los datos obtenidos. "La confianza, calidad y fiabilidad de la información resultante son sólo algunas de las ventajas que tiene el Big Data para una correcta gestión empresarial", asegura la experta.
Fruto de la relevancia de este fenómeno ha surgido una profesión que se posiciona como una de las más demandadas del presente y sobre todo para el futuro. Según el informe EPyCE 2015, se trata del segundo perfil más complicado de encontrar en la actualidad en España y será el que más se cotizará durante los próximos tres años. Los candidatos demandados por las empresas suelen ser personas con formación en el ámbito de las Matemáticas, Estadística, Informática o Telecomunicaciones. "Es más difícil de lo que a priori pueda parecer, encontrar a gente que sepa extraer información útil y relevante gracias a ingentes cantidades de datos", advierte García.
Las empresas españolas se han dado cuenta de la importancia de desenterrar la información acumulada con el objetivo de que ésta sea aprovechada para predecir el comportamiento futuro de los clientes. Por ello, la persona que es capaz de extraer conclusiones a partir de multitud de datos es deseada en cualquier sector empresarial. "Para todos aquello que estén dudando sobre su futuro profesional, la opción de dedicarse al análisis de datos es una de las más acertadas en cuanto a las salidas profesionales disponibles que tenemos hoy en día", concluye la experta.