La robótica doméstica, con el desarrollo de aparatos dotados de inteligencia artificial para interactuar de forma autónoma con las personas como ayudantes en tareas cotidianas es actualmente uno de los nichos más prometedores para emprender, ha dicho en Madrid Steve Wozniak, cofundador de Apple.
El ingeniero Wozniak, padre del primer ordenador personal, ha intervenido en la inauguración de la feria internacional de emprendimiento e innovación South Summit, en la que participan responsables de un centenar de fondos de inversión y 175 conferenciantes de referencia mundial.
"Si empezara ahora de nuevo, creo que me dedicaría a los robots". Trabajaría en ese nivel de funcionalidad de programación para tareas más básicas y cotidianas. "Por ejemplo robots que me lavaran el coche", ha afirmado.
El reto próximo está ahí, en "la inteligencia artificial", en el desafío de desarrollar máquinas que interactúen de manera natural con las personas y que las entiendan y sepan de forma autónoma relacionarse con ellas.
Internet de las cosas
También el Internet de las cosas es un área que le sorprende, dijo. Ese fenómeno vertiginoso de conexión en la red de todo con todo y con todos ofrece multitud de nuevas posibilidades y funcionalidades por parte de los propios objetos, ha explicado.
Ha recordado que ya se trabaja intensamente en ello, pero hay espacio para mucho más. Ha destacado los grandes avances en domótica, con el desarrollo de sensores conectados a la red que miden todo tipo de parámetros en el hogar, como la temperatura, la humedad, etc.
Wozniak ha insistido en el tesón, en el trabajo intenso y la capacidad de resistencia ante posibles fracasos que se necesitan para sacar adelante un negocio a partir de una idea innovadora.
Sus comienzos emprendedores
Ha recordado sus complicados inicios en el mundo del emprendimiento sin apenas dinero y su empeño por popularizar los ordenadores en una época en la que eran excesivamente caros y complicados de utilizar.
Los ordenadores de los setenta eran muy complejos desde el punto de vista técnico, con muchas teclas e interruptores "que estorbaban". "Nosotros queríamos programas fáciles de usar, que la gente los entendiera", ha insistido Wozniak, cofundador de Apple, junto con el fallecido Steve Jobs.
Para emprender, ha continuado, "hay que sentarse a pensar cómo hacer algo sin tener ni idea de cómo hacerlo". Es como "intentar escribir un libro sin haber leído libros antes", ha añadido para ilustrar mejor su idea.
De hecho, así fue como "yo generé color" en la informática, ha dicho. Fue una revolución porque hasta entonces, en la década de los setenta, "todo era en blanco y negro" en el mundo de los ordenadores.
Innovación y diferenciación
Para emprender, también hay que intentar ir más allá de los planteamientos tradicionales cuando se busca formalizar un proyecto y plantearse "qué se podría hacer una vez concluido para mejorarlo".
Cuando las cosas se hacen de forma diferente a lo convencional, uno deja de competir con la generalidad y se hace único en el mercado, ha explicado.
Otro consejo que ha dado es que "hay que divertirse con lo que hacemos" para tener éxito; "para mí la electrónica ha sido siempre muy divertida". "Nunca me sentí inspirado por un gran negocio con el tema de los ordenadores, sino por la pasión de programar y fabricar dispositivos más asequibles".
"Yo era el técnico en el equipo con Steve Jobs. Yo quería diseñar todos los componentes de un ordenador, desde el software hasta el hardware. Jobs quería un gran negocio, se encargaba de los pedidos, del marketing, con gran inteligencia para acercarse a los mejores y aprender siempre de ellos".
El último consejo que Wozniak ha dado a los jóvenes con espíritu emprendedor que le escuchaban ha sido más terrenal.
Les ha recomendado no dar de lado un trabajo eventual que les haga subsistir, porque normalmente en los inicios se tiene poco dinero, y les ha animado a trabajar intensamente en las ideas innovadoras durante todo el tiempo libre disponible para sacarlas adelante.