Pau García-Milà fundó con 17 años su propia empresa, EyeOs, que inventó el escritorio web en 2006 -pasó a ser el mayor proyecto de software libre creado en España en 2008 y posteriormente fue adquirida por Telefónica-. Pau ha realizado una crítica en la que ha explicado que en el emprendimiento y en la innovación cuando todo va mal nadie, te apoya; sin embargo, si las cosas empiezan a ir bien, encuentras ayuda de muchas personas o instituciones.
Para él, "lo más bonito de la innovación es que no puedes prever lo que vendrá" y ve necesaria una renovación de los estándares, así como romper las normas de juego. Un ejemplo representativo del que ha hablado ha sido cómo algunas cuentas de Twitter que, a priori, deben ser serias, se convierten en una fuente mucho más cercana para el usuario. En concreto, la cuenta de la Policía, a través del Community Manager Carlos, quien revolucionaba Twitter cada vez que escribía un tweet.
Se puede llegar a innovar de muchas maneras, pero deben asentarse en tres bases: las buenas ideas, la pasión, la comunicación. "Debemos preguntarnos cuál es nuestro objetivo. Después de fracasar, que no es malo, nos preguntamos qué hemos hecho mal", explicó sin olvidar que el tiempo, que en nuestros días corre muy rápido, es un enemigo al que las personas deben enfrentarse. "El mundo tiene prisa y necesitamos comunicar ideas", aseguró.
La importancia de la pasión
La pasión es un elemento clave, así como la creencia de que el proyecto que tenemos en mente va a funcionar. "No existe el fracaso, debemos abstraernos de la incertidumbre y poner toda nuestra pasión", recalcó.
A todo el mundo se le ocurren ideas nuevas en su día a día y que quizá sean emprendedoras e innovadoras, pero el fallo está en que no se llegan a materializar.
