El Barómetro Económico de Sevilla, elaborado por el colegio de Economistas bajo la dirección de la profesora Carmen Delgado, de Universidad Loyola, prevé una tasa de paro en Andalucía al cierre de 2025 del 15,2%, por debajo del 16,27 de la EPA del segundo trimestre de este año. Caso de alcanzarse ese 15,2 sería el mejor registro desde el primer trimestre de 2008 (14,78%), el último antes del estallido de la burbuja inmobiliaria.
La previsión de los Economistas es cerrar este año en un 16,3% para lograr en el siguiente ejercicio una reducción de 1,1 puntos. Se da la paradoja de que Andalucía crearía empleo con más fuerza que en el conjunto de España a pesar de que la comunidad no conseguiría converger en términos PIB, pues los economistas prevén un incremento de la riqueza nacional del 2,7 y el 2,3 para este año y el próximo, mientras que los datos autonómicos serían del 2,6 y 2,0. Cuatro décimas más de brecha.
Sin embargo, pese a esos niveles de crecimiento, el Barómetro estima un crecimiento de la ocupación del 1,7% en los dos ejercicios contemplados para España, y del 2,5% para Andalucía. "La comunidad parte de una situación de tasas de desempleo más elevadas, por lo que tiene más capacidad para crear empleo aún con menos crecimiento", apunta Carmen Delgado, directora del estudio. La previsión es que el desempleo en el periodo 2024-25 se reduzca 5 décimas en España y en Andalucía 11.
Evolución
Hay que entender la situación de partida: en el primer trimestre de 2008 la tasa de paro era del 14,7%. En momentos anteriores se rondó el 10%, aunque nunca se llegó a bajar a un dato de un solo dígito. Con el paro estructural andaluz aquello se consideró incluso una situación de pleno empleo en la práctica. Sin embargo, en un sólo trimestre la tasa subió al 16% e inició una escalada imparable hasta el primer trimestre de 2013, cuando tocó techo en el 36,77%.
La tasa (medida en la EPA) no bajó del 20% hasta 2022. Y en dos años se ha conseguido rebajarla en 3,7 puntos. El descenso del paro en Andalucía ha sido en los últimos años más pronunciado en Andalucía que en resto de España. La buena tendencia nacional se ha visto respaldada por el auge del autoempleo y políticas de incentivos a las contratación indefinida que han intensificado el ciclo nacional.
Si se cumplen las previsiones del Barómetro, los 4,1 puntos de brecha entre la tasa de paro nacional y andaluza a final de 2025 serían la cifra más baja en lustros, pues habitualmente está en 5 o más.
Problemas de fondo
El decano del Colegio de Economistas de Sevilla (y también decano de los economistas andaluces) Francisco J. Tato han señalado dos aspectos que dificultan cerrar aún más esa brecha: el "tremendo desajuste" entre oferta y demanda en el mercado laboral por motivos de formación y lo que a su juicio es un "excesivo cinturón social, de paguillas", que desincentiva la búsqueda de empleo. "Es un modelo de fracaso" que tiene incidencia en cuestiones como inmigración y otras. Tato se ha mostrado partidario de medidas de flexibilización del mercado laboral.
El Barómetro Económico recoge tanto para la provincia de Sevilla como el conjunto de Andalucía una evolución positiva de prácticamente todos los indicadores económicos, principalmente exportación, constitución de sociedades mercantiles y pernoctaciones, salvo el de matriculaciones de vehículos, sobre el que inciden además de factores como los tipos o la inflación un cambio en los hábitos de consumo que han hecho que el coche propio no sea una necesidad ya para buena parte de la población.