
Desde que en enero de 2021 se igualaran las bajas de maternidad y paternidad a 16 semanas, muchos padres han visto cómo sus periodos asociados al nacimiento de sus hijos han variado. Se da el caso de que, hasta 2017, las bajas eran de solo 15 días para los padres (y antes, en 2007, de solo dos días) lo que hace que no sean pocos los padres que han podido ver cómo para hijos nacidos con años de diferencia han visto cómo sus semanas de baja se alargaban.
La reforma de la legislación que dio lugar a la igualdad se hizo buscando repartir de mejor manera el peso de la llegada de los hijos y el impacto sobre la carrera laboral de los progenitores, siempre desfavorable para las madres.
Ahora bien, el cambio también ha provocado que muchas empresas, especialmente las más pequeñas, tengan que lidiar con más semanas de baja, y que los padres deban organizarse para ver cómo repartirse esas semanas.
Además, en el caso de los trabajadores autónomos, también se dan problemas, debido a que con las cotizaciones más habituales les supone una pérdida de ingresos importante al tener que pausar la facturación.
Cuál es la opción favorita para la baja de paternidad
Durante las seis primeras semanas tras el nacimiento del bebé, tanto la madre como el padre deben tomar permiso. Después de eso, la mayoría de las madres suelen pasar los casi tres meses restantes sin interrupción, mientras que los padres prefieren tomar el resto de la baja cuando sus parejas regresan al trabajo.
Pero, ¿qué opción es la más elegida? A falta de estadísticas, una reciente encuesta en LinkedIn Noticias España en la que han participado más de 1.000 usuarios de la red social profesional da algunas ideas.
La mayoría (un 46%) prefiere organizarse dividiendo su baja en dos etapas, las 6 primeras semanas y después el resto. Mientras, un 28% prefiere tomarla toda seguida, mientras que un 26% dice que lo hace en más de dos partes.
"Veo estupendo la equiparación de la baja por paternidad, pero la realidad es que los hombres no sufren ni embarazo, ni posparto.Este aumento de la baja paternal ha repercutido con el consiguiente recorte de la baja durante el embarazo. Procediendo y creando la tendencia a dar la baja por riesgo laboral durante el embarazo cada vez más tarde. Para mi parecer, lo que deberían haber hecho es ampliar la baja de la mujer tanto en el embarazo como en el postparto", comentaba una usuaria.
Por su parte, otro comentaba que "para mi, la flexibilidad y la confianza son la clave. En mi caso , lo que hice fue reducirme la jornada a la mitad (también tenía las vacaciones de ese año). Cuando la situación lo requería, volvía a la semana de jornada completa alargando de esta manera el calendario de mi reducción. Así pude prolongar mi permiso de paternidad sin dejar a mi empresa huérfana de mi puesto. Pero entiendo que cada puesto y cada empresa son un mundo".