El teletrabajo ha dado lugar al auge de un nuevo tipo de trabajador: el denominado nómada digital. Profesionales que, con ordenador y con conexión de wifi cerca pueden trabajar desde cualquier parte del mundo, y lo ponen en práctica.
Ante esto, muchos países se han puesto en marcha para intentar captar a estos profesionales, en un momento en el que atraerlos puede suponer también recaudación.
Italia ha sido el último en anunciarlo. Su visado para nómadas digitales es una opción que se aprobó el pasado 28 de marzo y que permitirá a los no residentes trabajar a distancia en el país durante todo un año.
Italia abre la puerta a teletrabajadores "cualificados"
La ley pretende animar a los trabajadores a distancia que no residen en la Unión Europea a pasar un año viviendo (y gastando) en Italia. Sin embargo, la ley no facilitará que ciertos trabajadores a distancia vengan a vivir el sueño italiano. El visado está destinado a trabajadores a distancia "altamente cualificados".
El gobierno italiano aún no ha definido claramente qué significa "altamente cualificado", pero se cree que habrá un requisito de ingresos mínimos para los solicitantes seleccionados.
Italia se une así a otros países que ya contaban con medidas para atraer a estos profesionales y que recopilamos a continuación.
Croacia
Croacia empezó a dar la bienvenida a los nómadas digitales en enero de 2021.
Solicitar vivir en el país balcánico sin embargo no es del todo sencillo. Los teletrabajadores también deben demostrar que tienen suficiente dinero para mantener su estancia, con unos ingresos de 2.200 euros al mes o unos ahorros de unos 25.000 euros para todo el año.
Los trabajadores remotos también deben planificar su estancia para no más de un año. Las estancias temporales para nómadas digitales se conceden por un máximo de un año y no pueden prorrogarse, según la página web del gobierno. Los interesados pueden volver a solicitarla seis meses después de que haya expirado la estancia anterior.
Dubai
Todas las nacionalidades pueden solicitar acceder al nuevo programa de trabajo a distancia de Dubai, siempre que ganen el equivalente a 5.000 dólares al mes.
Además, el precio de la solicitud es de 287 dólares. Al igual que otros programas, los trabajadores pueden salir y volver a entrar a voluntad, pero las estancias pueden ser revocadas si los viajeros se van durante seis meses seguidos.
Bahamas
Trabajar desde las Bahamas puede ser un sueño para muchos, ahora quizá más accesible gracias al Bahamas Extended Access Travel Stay.
El nuevo permiso de residencia de 12 meses, denominado BEATS para abreviar, permite a los trabajadores y estudiantes a distancia vivir y desplazarse entre 16 islas diferentes de las Bahamas, incluidas Andros, las Exumas, Eleuthera y Paradise Island.
Los teletrabajadores deben tener un seguro médico y unos ingresos anuales de al menos 70.000 dólares. El coste de la solicitud es además de 500 dólares.
Estonia
Estonia ha sido un país pionero en habilitar facilidades para atraer trabajadores digitales extranjeros desde bastante antes de que la COVID irrumpiera.
Desde agosto de 2020, los trabajadores en remoto que reúnan los requisitos necesarios pueden solicitar la posibilidad de acudir a Estonia para vivir hasta un año con la tranquilidad de que pueden trabajar legalmente, en un programa añadido a su ya conocido e-Residency. El Visado para Nómadas Digitales estonio exige, eso sí, o bien tener un contrato de teletrabajo estable o demostrar unos ingresos mensuales antes de impuestos de unos 3.500 euros.
España también lo planea
España también planea incorporar facilidades para este colectivo en la anunciada Ley de Startups.
El objetivo del Ejecutivo es adaptar un ecosistema empresarial y favorecer la captación de trabajadores en sectores y empresas emergentes es necesario dotar de la agilidad y la flexibilidad necesaria a un ámbito laboral especial. Uno de los puntos implicados en esta nueva ley es un visado específico con el fin de favorecer la instalación en España de los llamados 'nómadas digitales'. Este tipo de visado está dirigido a aquellas personas que trabajan en España para una empresa extranjera, incluyendo en el ámbito audiovisual.