Albert Rivera, presidente de Ciudadanos, ha insistido en que él no engaña a los ciudadanos como hacen otros líderes políticos. Por eso, reconoció que los de este domingo fueron unos malos resultados "sin paliativos y sin excusas", y anunció que había convocado para este lunes una Ejecutiva Nacional a la que propondrá la convocatoria de un congreso extraordinario para que "los afiliados decidan el futuro del partido". En directo | Así le hemos contado la noche electoral.
Ciertamente, los resultados son "malos, sin paliativos", como los calificó el líder de la formación naranja. Sus escaños se han reducido de 57 que obtuvo en las Generales de abril a 10. Casi uno de cada seis. Además, ha perdido más de la mitad de los votos, 1,5 millones de votos en las elecciones del 10-N frente a los 4,23 millones de abril, y ha pasado de acaparar el 15,8% de los votos hace siete meses a algo más del 7%.
Rivera no habló de "dimisión", ni de "poner su cargo a disposición del partido"
El líder del partido liberal insistió varias veces en que, ante todo, es un demócrata. Y lo es porque sabe reconocer los resultados, aunque sean malos. Por ello, empezó felicitando al ganador Pedro Sánchez y el partido socialista. "Los españoles han querido más Sánchez y más Vox y menos centro", remarcó.
Rivera no habló de "dimisión", ni de "poner su cargo a disposición del partido", aunque sí puso el futuro de Ciudadanos en manos de los afiliados. "Mañana (por hoy lunes) convocaré a la Ejecutiva Nacional para compartir con ellos la derrota y asumir la responsabilidad". Una derrota de la que se culpó en primera persona: "Cuando los resultados son buenos, los líderes políticos presumen", pero cuando son malos no todos los líderes asumen su responsabilidad. "Yo digo las verdades, y los resultados han sido malos".
A la Ejecutiva le planteará la celebración de un congreso extraordinario para que "los afiliados decidan el futuro del partido", en una referencia velada a su cargo. Pero también a la línea que ha mantenido en los últimos meses el partido: "A partir de mañana, este partido tiene que marcar un nuevo rumbo".
Con el 99% de los votos escrutados, Ciudadanos se queda con solo 3 diputados en Madrid (en abril obtuvo un 20,9% de los votos), en Andalucía otros 3 (uno por Cadiz, otro por Málaga y el tercero por Sevilla), 2 en Cataluña (ambos por Barcelona) y otros 2 en la Comunidad Valenciana (Alicante y Valencia). En el resto de Comunidades Autónomas nada. Muy diferente a las anteriores de abril, en las que obtuvieron escaños por todas la Comunidades a excepción del País Vasco.
La tragedia se vio venir desde los primeros instantes del escrutiño, pues con el 16% se empezó a masticar una hecatombe anunciada pues arrancaron con unos paupérrimos 8 escaños, para crecer a los 10 con el 36% de recuento. Y ahí permaneció hasta el final.
No hubo ambiente de fiesta en la sede en la madrileña Plaza de Ventas. De hecho, el único tumulto que se escucho provino del los periodistas. No hubo banderas naranjas, ni siquiera afiliados en la calle. Hizo mucho frío y apenas unas docenas se concentraron en un cuarto con bocadillos y bebidas.
En petit comité, antes de empezar el recuento, en la formación de Rivera darían por buenos 25 diputados, teniendo en cuenta el pesimismo que han ejercido los sondeos estas últimas semanas.