
Todo apunta a que el Consejo de Ministros dará luz verde mañana al mecanismo extrajudicial que agilizará las devoluciones, si proceden, de lo que los bancos cobraron a sus clientes en concepto de cláusulas suelo hipotecarias. La tramitación se demoró la semana pasada cuando el Gobierno pospuso la aprobación ante las discrepancias existentes entre los dos ministerios concernidos, Economía y Justicia, y la necesidad de garantizar el apoyo el PSOE.
Para lograr este último objetivo, el Ejecutivo acepta la exigencia de los socialistas de que los bancos comuniquen, de forma individual a los clientes cuyas hipotecas tengan cláusulas suelo, que existe este protocolo de negociación. Ahora bien, el hecho de que la entidad informe de este modo a un usuario no implica que necesariamente tenga que sentarse a pactar una compensación con él. El Gobierno no podía reconocer una obligación así, ya que equivaldría a afirmar que la aplicación de estas cláusulas es
irregular por sí misma y en todos los casos. Ningún tribunal, ni siquiera el europeo, ha dictaminado eso, de manera que debe reconocerse a los bancos la capacidad de separar aquellos casos en los que consideren que no se puede alegar falta de transparencia o ignorancia del cliente.
Por su parte, este último en ningún momento queda desprotegido en la medida en que nunca se le veda la posibilidad de acudir a los tribunales, Podrá hacerlo tanto en el inicio mismo del proceso, si considera que sí hubo abuso aunque el banco discrepe, como al final, en caso de que, tras debatir con la entidad, haya quedado insatisfecho. Por tanto, el protocolo que habilitará el Gobierno reconoce los derechos de todas las partes y contribuirá a hallar una solución justa en este conflicto.