El presente año va camino de convertirse en un ejercicio de récord para las empresas del Ibex 35, debido a que sus ganancias ascenderán a 37.040 millones. Esa cifra supone un incremento de casi el 40% con respecto al beneficio neto cosechado en 2014. Se trata de una tendencia generalizada, de la que no sólo se benefician gigantes como Inditex, Banco Santander o Iberdrola; la mejor prueba de ello radica en que hasta 12 compañías del selectivo batirán sus marcas históricas de ganancias.
Detrás de un ímpetu de esta envergadura actúa, en primer lugar, la puesta en movimiento de todo el potencial que las firmas han acumulado tras años de ajustes y saneamiento, en los que el beneficio, cuando no caía, era mínimo. Pero hay más fuerzas en juego, en especial, la reanimación del mercado interno gracias a la entrada del PIB en una velocidad de crucero propia de años previos a la crisis, que le llevará a cerrar 2015 con un avance superior al 3%.
En paralelo, la depreciación sufrida por el euro con respecto al dólar ha consolidado las cuentas de las sociedades del Ibex en el exterior. Por último, tampoco debe menospreciarse el impacto en su factura energética de la caída del crudo por debajo de 50 dólares. La conjunción de todos estos factores hacen de 2015 un ejercicio atípico para los beneficios empresariales. Sin duda, en 2016, aún podrán notarse los efectos de un euro débil, debido a la ampliación de la política monetaria laxa del BCE.
Sin embargo, el incierto devenir de las tensiones en la economía internacional y, en clave interna, la desaceleración prevista del PIB español (e incluso el avance de las incertidumbres políticas) dificultan que se pueda repetir un avance tan vigoroso de las ganancias.