
El nuevo órdago secesionista de Junts pel Sí y la CUP en el Parlament reaviva el debate sobre la posibilidad de que el Gobierno suspenda la autonomía catalana, amparándose en el artículo 155 de la Constitución. Su activación es compleja, como corresponde a un mecanismo excepcional que requiere "una interpretación rigurosa", según explica a elEconomista el ministro Rafael Catalá.
Sin embargo, el titular de Justicia deja claro que el hecho de que el Gobierno esté en funciones no supone obstáculo. En España, como en toda democracia madura, la interinidad no es sinónimo de indefensión. Sus palabras son así un aviso para todo desafío que intente violentar la ley: las funciones institucionales que garantizan el Estado de Derecho están siempre en vigor.