Cuando le preguntas si, con su partido en Moncloa, le va a dar un cheque en blanco a Pedro Sánchez y si tiene el alma dividida en dos por su condicion de sindicalista y militante del PSOE desde hace más de 40 años, reacciona rápido: "Yo le voy a dar al presidente mi apoyo, pero la UGT no va a bajar su nivel de exigencia", y añade que el PSOE y Podemos "deben dejarse de puñetas y apostar por un Gobierno de izquierdas". Haber liderado durante un cuarto de siglo la UGT catalana, y llevar afiliado al sindicato socialista desde 1975 le han curtido en batallas laborales de todo tipo y no está dispuesto a bajar la guardia " Sin la derogación de la reforma laboral no habrá nuevo Estatuto de los Trabajadores". A Jose María Álvarez (Belmonte de Miranda, Asturias, 1956) en su entorno le llaman Pepe, haciendo honor a su fama de campechano y sencillo, con un discurso de sindicalista en estado puro, sin ninguna concesión a la galería, pragmático y resolutivo. Es la cara y la voz de la UGT, lidera uno de los dos sindicatos más importantes de España y ha conseguido en tiempo récord lo que parecía casi imposible: elevar la afiliación, en descenso desde hacía años. La entrevista se celebra horas después de que Pablo Iglesias se reuniera con los sindicatos, pidiendo su apoyo para conformar un Gobierno de coalición y él se muestra esperanzado: "Sería una barbaridad ir a una repetición de elecciones por falta de acuerdo de la izquierda". Dice que Magdalena Valerio está haciendo una buena gestión, pero es inmisericorde con la ministra de Economía: "Es un error pensar que tiene que sonreír a los poderosos".
Usted y Unai Sordo se han reunido con Pablo Iglesias, en lo que se interpretó como una forma de presionar para que haya un Gobierno de coalición con el PSOE, ¿qué temas estaban sobre la mesa?
Esta reunión, a petición de Unidas Podemos, se planteó para hablar de las negociaciones con el PSOE y la configuración de la mayoría para investir a Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. Somos conscientes de que Unidas Podemos puede ser una contribución importante para conseguir temas fundamentales que los sindicatos necesitamos. Hablamos de diálogo, pero sobre todo hablamos de programa.
¿Qué temas de ese programa se comprometió Podemos a apoyar sobre las reivindicaciones sindicales?
Iglesias se comprometió a apoyar el desmontaje de las reformas laborales. A nosotros nos gustaría que eso formara parte del acuerdo de Gobierno, con plazos cerrados y una metodología para realizarlo. A partir de ahí, desde la UGT estamos en disposición de poder hablar de un nuevo Estatuto de los trabajadores, pero antes de que se deroguen las reformas no nos sentaremos a hablar de ese estatuto.
"PSOE y Podemos deben dejarse de flirteos y apostar por un Gobierno de izquierdas"
¿Y por qué optan por derogar totalmente la reforma laboral y no por hacer acuerdos parciales, como pretende Pedro Sánchez?
Eso no es negociable. Nosotros optamos por la derogación. Salió la ministra Calviño intentando explicarnos que somos un poco absurdos, porque queremos la derogación, y señalando que lo importante es un nuevo Estatuto. ¿A quién quiere engañar esta señora? Ella sabe perfectamente que un nuevo Estatuto no lo vamos a tener en la próxima legislatura. Nosotros no vamos a ir a negociar uno nuevo sin que antes se hayan derogado las reformas.
¿A UGT qué le parecería que hubiera un Gobierno de coalición, con Pablo Iglesias de ministro? Porque Pedro Sánchez no quiere ese escenario…
A mí lo que me importa es que haya un programa de gobierno con compromisos concretos, y la forma de Gobierno que acuerden las partes me da igual. Lo importante es el programa, no los nombres: lo fundamental son las políticas, no los cargos.
¿Qué diferencia hay entre un Gobierno de cooperación y uno de coalición?
Estamos ante un cierto juego de palabras. Las organizaciones sindicales lo que tenemos que hacer es intentar forzar que haya un acuerdo de Gobierno de izquierdas. Nuestra posición es que PSOE y Podemos se dejen de flirteos y de puñetas y que vayan al fondo de la cuestión. Aquí hay temas muy serios, la extrema derecha ha tocado a la puerta, y eso es un riesgo claro para las políticas sociales y para las libertades públicas.Eso es estremecedor, y la izquierda debe unirse para frenar las políticas de extrema derecha y dejarse de formalismos.
"Es un riesgo para las políticas sociales y las libertades así como un negacionista de la violencia machista"
¿Usted descarta unas nuevas elecciones si finalmente no hay acuerdo PSOE-Podemos?
Me parecería una barbaridad tener que ir a una nueva convocatoria electoral por la falta de acuerdo de la izquierda. Que pueda haber una repetición de elecciones es una posibilidad cierta, pero sería una falta de respeto considerable a los ciudadanos.
¿Qué supone para UGT que se conforme un Gobierno de izquierdas?
Tener una mayoría de izquierda en el Congreso de los Diputados supondría poder abordar algunos de los problemas endémicos de este país, desde el sistema educativo, con especial atención a la formación profesional, pasando por la búsqueda de soluciones para frenar la degradación de las relaciones laborales o el tema de la temporalidad asfixiante, de la falta de aplicación de las normas laborales, y ¡cómo no! serviría para que hubiera una recaudación de impuestos más justa para que quien tiene más pague más y se puedan recuperar prestaciones sociales. Los problemas de las personas no pueden esperar, hay que dar solución a los tres millones y medio de parados que tiene este país, al millón y medio de hogares con todos sus miembros en paro, al millón de familias que no tienen ningún tipo de ingresos, y a ese tercio de ciudadanos que declara que sus ingresos anuales son inferiores al salario mínimo interprofesional…
¿Cree que la ministra de Trabajo se mantendrá en el cargo? Ese ministerio es una de las aspiraciones de Podemos…
La composición del Gobierno es responsabilidad exclusiva del presidente. En todo caso, nuestra relación con la ministra Magdalena Valerio ha sido positiva, y creo que ha sido una buena gestión. Todo el plan que ha puesto en marcha de la inspección de trabajo ha dado resultados positivos.
¿Y de la ministra Nadia Calviño también tiene buena opinión? ¿Cómo han sido las relaciones?
Yo con la ministra de Economía solo he tenido una reunión a petición mía. Es un error pensar que es la que tiene que sonreír a los poderosos, y además ser la poderosa del Gobierno. La ministra de Economía tiene que servir, como la de Trabajo, a un programa y a un compromiso con los electores y las electoras y no hace falta que haya ese doble juego.
"Las personas no pueden esperar, hay que dar solución a los 3,5 millones de parados que tiene este país"
¿Por qué dice usted que el centro político está desierto en este país?, ¿Ciudadanos ya no lo representa?
Ciudadanos ha hecho un giro a la derecha, desde el punto de vista de lo que son las libertades, y eso tiene que ver con el soporte que Vox le está dando. Los silencios clamorosos de Ciudadanos ante las manifestaciones de algunos dirigentes de Vox en Andalucía son absolutamente vomitables, y supongo que insoportable para cualquier persona de centroderecha que haya apoyado a Albert Rivera. Todos han ido corriendo a buscar los votos de Vox, y se han olvidado que muchos ciudadanos de nuestro país lo que quieren es un centro progresista, al estilo de Alemania o Francia.
La marcha de Manuel Valls, de Toni Roldán o de Javier Nart, ¿es la punta del iceberg? ¿Usted también cree que le están estallando las costuras del partido a Albert Rivera?
No sé si la marcha de destacados dirigentes de Ciudadanos es o no la punta del iceberg, pero pone de manifiesto clarísimamente hasta qué punto Cs ha hecho un giro a la derecha, que muchos no han entendido. Ya veremos lo que hace ahora el PP, pero yo creo que se va a centrar más. En todo caso, Vox ha contaminado todo, y aquí hay un centroizquierda que se ha quedado huérfano de partido político.

Hombre, Cs lo que dice es que quien ha pactado con Vox es el PP, que ellos se han quedado al margen…
Mienten. Hemos visto los papeles. ¿A quién pretenden engañar? Las mentiras reiteradas de la señora Arrimadas no hay por dónde cogerlas y tienen las patas muy cortas. Cs tiene su credibilidad bajo mínimos.
¿Sería coherente que PP y Ciudadanos se abstuvieran para frenar la entrada de los independentistas?
Poner por la izquierda un cordón sanitario a los independentistas de izquierdas es un error. Los ciudadanos que han votado a Esquerra Republicana de Cataluña quieren que haya políticas de izquierdas en España, que al fin y al cabo son las suyas. Yo nunca voy a poner cordones sanitarios con grupos políticos que son necesarios para conformar mayorías, y eso no quiere decir que haya que hacerles ninguna concesión ni convocar referéndum, ni plantear indultos, ni pagar ningún precio de los que se están diciendo. Me parece obsceno que el PP y Cs, que intentaron que el PSOE se abstuviera para que Rajoy fuera presidente, ahora tengan una posición completamente distinta. Además, el apoyo de la izquierda independentista no es nada vergonzante.
¿Y Bildu no es un mal compañero de viaje? Porque lo de Navarra ha levantado ampollas…
Este país tiene una historia muy reciente y dolorosa con el terrorismo, pero en algún momento hay que ponerle punto y final. Aquí ha habido una derrota de ETA, y en democracia, a la gente hay que dejarla que pueda expresar lo que piensa, siempre que cumpla con la legalidad.
¿Cree que Bildu contamina menos que Vox? Muchos dicen que tan mal compañero de viaje es Bildu para la izquierda como Vox para la derecha…
Esas comparaciones no me parecen nada razonables. Bildu tiene su pasado, pero cualquier persona que no tenga temas pendientes con la justicia y que cumpla con la ley, el Estatuto y la Constitución puede dedicarse a hacer política. El fenómeno de Vox es muy, pero que muy preocupante. Estos que van dando carnet de constitucionalistas, ahora se alían con quienes reniegan del principio de igualdad entre hombres y mujeres, que es uno de los pilares de nuestra Constitución. Hay mil mujeres asesinadas y Vox es un negacionista de la violencia machista. Vox es un fenómeno que hay que explicar a los críos en las escuelas, para que no se repita la historia más oscura de nuestro país. Hay que luchar con uñas y dientes para que no nos roben la memoria histórica, ni el nombre de las personas que todavía están en las cunetas de toda España.
¿Si hay un Gobierno de izquierda existe una posibilidad real de subir a 1.200 euros el SMI, como reclama Pablo Iglesias o no?
En esta legislatura, por supuesto. Pero nosotros, desde la UGT, no nos vamos a quedar en la reivindicación de los 1.200 euros.
¿Cuál es su objetivo entonces?
En el congreso de la confederación que celebraremos en 2020, vamos a plantear para 2025 ir a un salario mínimo que esté en torno a los 1.500 euros, que es donde está la media en los países del entorno de la UE.
Usted ha llamado tontos a altos cargos del Banco de España por decir que la subida del SMI perjudica la creación de empleo. ¿Es para tanto?
He utilizado la palabra tontos refiriéndome a los expertos del Banco de España, pero podría haber dicho que son demasiado listos o que se pasan. Tienen intereses de parte, y desde una institución como el Banco de España no se puede pedir a un país mejorar la productividad y bajar los salarios, que es lo que están haciendo ellos. Ya sé que ellos son supereconomistas superlistos, y nosotros menos listos, pero el Banco de España se está extralimitando en sus funciones y en su obligación.
¿En qué se extralimitan?
Por ejemplo, es una vergüenza que la patronal haya firmado un acuerdo con los sindicatos para subir el salario mínimo en convenio a 1.000 euros a partir de enero de 2020, y en estos momentos tengamos grandísimos problemas para que los convenios apliquen los 900 euros del SMI. El Banco de España debería llamar la atención a los empresarios de este país, y no a los trabajadores.
Los empresarios dicen que firmaron 850 euros y luego Sánchez, vía Real Decreto en los famosos 'viernes sociales', lo subió a los 900…
Firmamos 850 euros para 2019 y 900 euros para 2020. Ese acuerdo lo firmamos con un Gobierno del PP, y entonces era un buen acuerdo. Pero es evidente que ahora hay un nuevo Ejecutivo, con un programa de izquierdas, y la exigencia de los sindicatos no es la misma a un Gobierno de izquierdas que a uno de derechas. Seremos más exigentes con Sánchez de lo que fuimos con Rajoy, porque el PSOE ha ganado con el compromiso de aplicar un programa de izquierdas.
¿Que la deuda pública se haya elevado en 18.000 millones es motivo de alarma? El Gobierno va a tener que recortar deuda por valor de 36.000 millones hasta final de año…
Eso hay que solventarlo subiendo los impuestos, y tienen que pagar quienes más tienen. La Hacienda Pública tiene que reformarse para que haya más controles en relación con el fraude. España está 9 puntos por debajo en presión fiscal en relación con la media de la zona euro, y ahí tenemos un camino para recorrer y trabajar. Esa es la fórmula que deberíamos utilizar para ir progresivamente bajando deuda y para tener un nuevo déficit.
Y el asunto de las pensiones, ¿se debe resolver sí o sí en el pacto de Toledo? Porque los números en la Seguridad Social están disparados…
Con el tema de las pensiones nosotros tenemos un problema de ingresos, no de gasto. Somos un país que no gasta mucho en pensiones, no llega al 10 por ciento del PIB. Alemania está por encima del 13 por ciento , Francia en torno al 15 por ciento, e Italia lo mismo. Lo que hay que hacer es abordar una reforma de las pensiones desde el punto de vista de la recaudación, y eso tiene mucho que ver con la calidad del empleo y los salarios. Lo que se va a aumentar es la calidad del empleo, y subirá la recaudación, y eso tiene que ver con nuevas tecnologías y con la decisión de que la robótica pague impuestos de manera directa.
¿Cree que va a haber elecciones anticipadas en Cataluña, después del juicio del 'procés'? ¿Sería partidario de los indultos?
Espero que haya una sentencia justa. La mayoría de los catedráticos constitucionalistas de este país no ven delito de rebelion . En todo caso, en Cataluña hay mucha necesidad de diálogo, y de liderazgo en el independentismo, para que busque una nueva situación, que debe pasar por respetar el Estatuto y la Constitución. Espero que a partir de ahora se inicie una nueva etapa, porque es lo que necesitan Cataluña y España.
¿Usted discrepa con Unai Sordo cuando dice que al presidente, cuando sea investido, CCOO no le va dar ni uno ni cien días de gracia?
El balance del Gobierno de Pedro Sánchez es claramente positivo. Vamos a ver cuál es el Consejo de Ministros, si repiten ministros actuales o no, y para ver si continúan las políticas o entramos en una fase nueva. Yo le doy al presidente del Gobierno mi apoyo, pero la UGT no va bajar su nivel de exigencia. En todo caso, Sánchez representa la esperanza para una parte muy importante de los ciudadanos y ciudadanas de nuestro país. Eso es más importante que los cien días de gracia.