
El déficit comercial internacional de bienes y servicios de EEUU creció un 1,5% en marzo, hasta los 50.000 millones de dólares, según ha informado este jueves el Gobierno y desde los 49.300 millones de dólares del mes anterior, cifra revisada tras marcar 49.400 en una primera lectura.
Las importaciones aumentaron un 1,1%, hasta los 262.000 millones de dólares, mientras que las exportaciones subieron un 1%, hasta los 212.000 millones de dólares.
La cifra es similar a los 50.100 millones de dólares anticipados por los analistas en marzo. El acumulado de los primeros tres meses de 2019 mostró un descenso del 3,7% respecto al mismo periodo de 2018.
El déficit con China, muy sensible políticamente, descendió y se ubicó en marzo en 28.300 millones de dólares, el menor nivel en tres años.
El presidente estadounidense, Donald Trump, ha lanzado una agresiva agenda proteccionista que ha incluido la renegociación del Tratado de América del Norte (TLCAN) con Canadá y México, la imposición de aranceles a China y la amenaza de nuevas sanciones comerciales a la Unión Europea.
China y la UE han respondido con medidas recíprocas contra productos estadounidenses. Precisamente hoy se espera que EEUU y China tengan una nueva ronda de conversaciones para alcanzar un acuerdo comercial después de que Trump amenazase a comienzos de semana con aranceles adicionales a centenares de importaciones chinas si no se llegaba a un pacto en la medianoche del jueves al viernes.
Estas tensiones ha provocado inquietud en los mercados financieros y dudas sobre la evolución de la economía global. En abril, el Fondo Monetario Internacional (FMI) presentó sus últimas previsiones de crecimiento global, que redujo en dos décimas respecto a lo calculado en enero, hasta el 3,3%, como consecuencia de los efectos sobre la actividad económica mundial de estas tensiones comerciales.