
El presidente de la Cámara de Comercio de España, José Luis Bonet, ha sido claro y conciso al ser preguntado por el sentimiento de sector empresarial tras la subida de impuestos prevista en el proyecto de Presupuestos Generales que fue tumbado en el Congreso en el pasado mes de febrero y que tras la celebración de las elecciones y la victoria del PSOE vuelve a la agenda política de los próximos meses.
"La respuesta es clara, hay preocupación", señaló Bonet durante su intervención en el encuentro Liderazgo, Economía y Sociedad celebrado en la sede del Consejo General de Economistas donde se expusieron las conclusiones del Informe de Primavera de la Comisión Europea sobre España.
"Los ánimos del empresariado son buenos y cualquier cosa que desanime no es bueno y hace perder potencia. Hay que tener cuidado con políticas que pueden desanimar, puede que vayan en contra de esa competitividad", aseveró sobre la ya anunciada intención del Gobierno de elevar el gravamen a las empresas.
Cabe recordar que tanto el PSOE como Unidas Podemos han hecho pública su intención de incrementar el impuesto sobre Sociedades, aunque mientras los socialistas solo vislumbran unos ingresos adicionales de 1.776 millones, la formación morada sube esta cifra a 4.000 millones.
De este modo, su líder Pablo Iglesias aboga por un alza del tipo mínimo del 15%, mientras que la limitación de la doble imposición que propone el PSOE para grandes empresas, incluye en sus propuestas para Sociedades fijar en cuatro años el plazo máximo para compensar las bases negativas de ejercicios anteriores, hacer una profunda remodelación en lo que pagan tanto las sociedades de inversión de capital variable (sicav) como las cotizadas anónimas de inversión en el mercado inmobiliario (socimi) y revisar el régimen de las entidades de valores en el extranjero (ETVE), que manejan un amplio porcentaje de la inversión extranjera en España. Además, los socialistas proponen un tipo mínimo del 18% en el caso de las compañías de hidrocarburos y del sector financiero.
En este mismo encuentro, con motivo del Día de Europa, y en referencia a la evolución socioeconómica, Bonet señaló que las compañías españolas han adoptado una posición preferente en el plano internacional, "en lo que ha sido fundamental la integración europea". Por ello, defiende la continuidad del proyecto comunitario como factor fundamental para el desarrollo de la economía y de la actividad comercial de las compañías españolas.