Las trabajadoras en España perciben salarios entre un 10% y un 37% menores que los hombres, siendo la media del 23% inferior al género masculino, una cifra que revela la desigualdad que aún existe en España, según constata el último estudio de la consultora GAD3. En trabajos donde se requiere menor cualificación es donde mayor brecha salarial se establece. En nuestro país, ni siquiera la salida de la crisis económica ha logrado frenar esa situación, que solo en 2017 ensanchó la banda entre hombres y mujeres hasta en 104 euros/mes, habiendo incrementando la distancia en los últimos tres años en 229 euros, tal y como calculan los técnicos de Hacienda en su informe.
En 2017 (el último registro), y por comunidades, Asturias fue la región con mayor brecha salarial de España. En ella, los hombres ganan un 37% más que las mujeres, según los Técnicos del Ministerio de Hacienda. En el conjunto de comunidades de régimen común (todas menos País Vasco y Navarra), el salario mínimo de las mujeres fue de 16.568 euros, 4.849 euros y un 29,3% menos que los hombres.
En efecto, las comunidades autónomas con mayor brecha salarial son, además de Asturias (37,6%), Madrid (36,4%), Cantabria (34,9%), mientras que las que muestran menores diferencias son Canarias (16%), Extremadura (20,1%) y Baleares (20,9%).
La razón: las mujeres ocupan mayoritariamente los trabajos más precarios, con jornadas parciales
Los técnicos de Hacienda explican que las causas de la brecha salarial se deben, por un lado, a que las mujeres ocupan mayoritariamente los trabajos más precarios, con jornadas parciales y sueldos anuales por debajo de los 7.400 euros.
Pero no hay que olvidar el techo de cristal, ya que a partir de los 60.000 euros anuales las mujeres apenas copan un tercio de los puestos de trabajo. En el top salarial con ingresos de más de 126.000 euros son solo dos de cada 10 trabajadores. Gestha añade que la brecha salarial aumenta con la edad y se intensifica con la maternidad y el cuidado de los mayores.
Así, los saltos más significativos se producen entre los 36 y 46 años y las mayores diferencias de sueldo entre unos y otras a partir de los 65 años, una edad en la que la brecha supera los 11.400 euros.
A nivel internacional, destacaba este jueves la Organización Internacional del Trabajo (OIT), en los últimos 27 años la brecha de empleo entre hombres y mujeres se ha reducido solo en dos puntos porcentuales. Y avisa de que, al ritmo actual, la brecha de género en lo relativo al trabajo doméstico y a los cuidados tardará 209 años en cerrarse.
Las variables de la distancia
La información que publica el Instituto Nacional del Empleo con respecto a la brecha salarial incide en que para comparar el salario femenino y masculino es necesario considerar muchas variables, como el tipo de jornada y contrato (las mujeres suelen tener más contratos a tiempo parcial que los hombres) o el sector económico (hay sectores más feminizados que otros).
Según los últimos datos del INE, hay más brecha en el sector servicios (28%) que en industria (26,1%) y construcción (10,3%). Mientras que, a nivel global, los progresos en dirección de la igualdad de género se han estancado en 2018, al no haber aumentado la participación de las mujeres en la fuerza de trabajo, mientras que se redujo su representación en la política y se experimentaron ciertos retrocesos en su acceso a la salud y la educación.
A mediados de los años setenta, según datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), las mujeres se incorporaban al mercado de trabajo a edades tempranas, entre los 20 y 24 años, para abandonar después su empleo tras el matrimonio -en muchos casos para siempre-, a partir de los años ochenta, la tasa de empleo de las mujeres mayores de 24 años comenzó a crecer de forma importante, incrementándose década tras década, en todos los grupos de edad.
Desde 2013, la tasa de actividad femenina se ha estancado. Por tanto, la brecha de género en la actividad se ha ido reduciendo, pero persiste y se observa un frenazo en los últimos cinco años.
Los salarios de las mujeres deberían incrementarse en 45.600 millones de euros en términos absolutos para igualar a los de los hombres
Los salarios de las mujeres españolas deberían incrementarse en 45.600 millones de euros en términos absolutos para igualar a los de los hombres, según se desprende del informe Women in Work Index realizado por PwC. El informe también pone de relieve que España se mantiene a la cola de los países desarrollados en materia de integración femenina en el mercado laboral, solo por delante de Italia, Chile, Grecia, México y Corea. En concreto, España ocupa la posición 28 del ranking de 33 países de la OCDE incluidos en el estudio y que se realiza teniendo en cuenta diferentes variables.
Falta de oportunidades
Según revela el Gender Gap Index del Foro Económico de Davos, la falta de igualdad de oportunidades ha aumentado en España durante la crisis económica, remarcando que ha pasado del puesto 10 en igualdad de género en 2007 al 29 en 2018. En cuanto a igualdad salarial, nuestro país ocupa el puesto 129 de las 149 economías analizadas.
Revertir esta situación es un objetivo "inaplazable", subrayaba la ministra Nadia Calviño esta semana, y "no sólo por razones de justicia y equidad, sino también por razones de pura racionalidad económica". Además, algunos estudios revelan que nuestro país estaría per- diendo al menos el 15% del PIB por la brecha de género.
A propósito de este tema social tan sensible, los populares de Pablo Casado recuerdan estos días que, según Eurostat, la brecha salarial de género en España fue del 14,2% en 2016-tres puntos desde 2011-.
La mujer en la política
Llega el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, y se suceden las estadísticas sobre brecha salarial de género o sobre las pocas mujeres que hay aún en los consejos de administración de las principales empresas. La mayoría de partidos políticos, a su vez, reivindica la figura de la mujer. Partiendo de la base de que ninguno de los cinco principales partidos políticos españoles tiene ni ha tenido hasta la fecha una lideresa, haciendo un repaso a sus ejecutivas se puede apreciar que los esfuerzos hechos hasta la fecha han sido también insuficientes.
Así, en el PSOE la Comisión Ejecutiva Federal cuenta con 28 hombres y 20 mujeres, mientras que el Comité Ejecutivo del PP está integrado por 64 hombres y 29 mujeres, el de Ciudadanos dobla en número de varones al de féminas (25 a 12) y Vox lo triplica (15 frente a 5). Sólo el Consejo Ciudadano de Podemos, integrado por 22 mujeres y 20 hombres más el secretario general, cuenta con más féminas en su dirección.