Economía

Nuevo fallecido en el quinto sábado de protestas de los 'chalecos amarillos' pese a las concesiones de Macron

  • La mayor parte de museos y monumentos permanecen cerrados
Imagen: Reuters.

Al menos 120 personas han sido detenidas durante el quinto sábado consecutivo de las movilizaciones de los 'chalecos amarillos' que han reunido en París a "unos pocos miles de personas", según datos de la Prefectura de la Policía de París. Una persona ha muerto, y se convierte en la séptima víctima de estas movilizaciones.

Un conductor se ha convertido en la séptima víctima mortal desde el inicio hace cinco semanas de las movilizaciones de los 'chalecos amarillos en Francia, al estrellar su vehículo contra un camión detenido por un retén de los manifestantes levantado en la localidad belga de Erquelinnes, en la frontera con Francia.

Hace una semana a esa misma hora, hacia las 11.00 horas, las fuerzas del orden habían arrestado a unas 500 personas por formar parte de grupos susceptibles de protagonizar actos violentos o por estar en posesión de objetos que podían utilizarse para ello. Este es el quinto sábado consecutivo de manifestaciones. La del pasado convocó a unas 125.000 personas en todo el país y a 10.000 en la capital.

Este sábado, según indicaron fuentes policiales a la cadena BFM TV, las cerca de 1.000 personas calculadas en París representa una movilización más débil que hace siete días. Los 'chalecos amarillos' mantuvieron esta nueva jornada pese a las medidas anunciadas el pasado lunes por el presidente, Emmanuel Macron, en favor del poder adquisitivo.

Como en las últimas semanas, los Campos Elíseos son el epicentro de la convocatoria parisina, en medio de un amplio dispositivo de seguridad que incluye registros a quienes quieren acceder a esa avenida.

Todas las líneas de metro en los aledaños han sido cortadas y las líneas de autobuses desviadas. Al igual que la semana pasada, diversos monumentos, museos y comercios parisinos cerrarán sus puertas como medida de seguridad, como el Arco del Triunfo, el Panteón, la Santa Capilla, el Petit Palais o el Museo de Arte Moderno. En cambio, esta vez sí abrirán otras como la Torre Eiffel, el Museo del Louvre, la Ópera de Bastilla y la de Garnier, el Museo del Hombre o los grandes almacenes Printemps, Lafayette o BHV.

El prefecto de policía de París, Michel Delpuech, explicó ayer que el dispositivo de seguridad será "parecido al de la semana pasada", cuando hubo 8.000 agentes apoyados por camiones con mangueras de agua a presión e incluso de blindados de la Gendarmería para desmontar barricadas.

Las concesiones de Macron

El contexto ahora ha cambiado. El 'Acto 5' de los 'chalecos amarillos' es el primero que tiene lugar desde que el presidente, Emmanuel Macron, accedió a aplazar las reformas fiscales previstas para el 1 de enero y que implicaban un aumento del precio de los combustibles.

Parte del colectivo aboga por dar un voto de confianza a un presidente que ha intentado tomar las riendas anunciando medidas en favor de la clase media como una subida del salario mínimo o la retirada de un impuesto a las pensiones, pero la línea más dura defiende seguir e incluso intensificar las movilizaciones.

En esta ocasión, además, las nuevas concentraciones llegan precedidas de una nueva semana de terror en Francia, a raíz del atentado perpetrado el martes en Estrasburgo por un joven radicalizado. Al menos cuatro personas murieron en este ataque, al que la Policía no puso fin hasta el jueves con la muerte del presunto autor, Cherif Chekatt.

El Gobierno ha apelado precisamente a este ataque para llamar a los 'chalecos amarillos' a rebajar su nivel de lucha. "Preferiría que la Policía hiciese su verdadero trabajo", ha llegado a decir el ministro del Interior, Christophe Castaner, en alusión a las tareas de "perseguir delincuentes y combatir la amenaza terrorista".

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky