
El Banco Central de Brasil mantuvo por cuarta vez consecutiva la tasa básica de intereses en el 6,50% anual, por lo que continúa en su menor nivel desde el inicio de la serie histórica, en 1986, informó hoy la entidad.
La decisión, esperada por los mercados, fue tomada por unanimidad por el Comité de Política Monetaria (Copom) del Banco Central, que justificó la manutención de los tipos al considerar la "evolución del escenario básico y el balance de riesgos".
"La coyuntura económica aún indica una política monetaria estimulante, o sea, con tipos de interés debajo de la tasa estructural", apuntó la entidad en su dictamen, en el que alertó de que ese estímulo "comenzará a ser retirado gradualmente" en caso de que los indicadores empeoren.
El organismo resaltó así que los "próximos pasos de la política monetaria continuarán dependiendo de la evolución de la actividad económica" y "de las proyecciones y expectativas de la inflación".
En este sentido, enfatizó que la "continuidad del proceso de reformas y ajustes necesarios" es "esencial" para mantener una "inflación baja en el medio y largo plazo, para la caída de la tasa de intereses estructural y para la recuperación sostenible de la economía".
El Banco Central indicó que los indicadores más recientes de la actividad económica en Brasil "evidencian una recuperación", pero "a un ritmo más gradual que lo vislumbrado al inicio del año" debido a los altos niveles de "ociosidad" y a las dudas sobre el seguimiento de las reformas.
Asimismo, subrayó que el escenario externo "permanece desafiante" con una "reducción del apetito al riesgo en relación a las economías emergentes", relacionada con las incertidumbres generadas en el comercio global, entre otros factores.
El organismo ha venido reduciendo de manera sostenida el indicador desde octubre de 2016, cuando decidió bajar el porcentaje 0,25 puntos desde los 14,25% hasta el 14,00%, a fin de estimular la economía en medio de la profunda recesión que comenzó en 2015 y de la que solo comenzó a recuperarse en 2017.
Desde finales de marzo de este año la tasa básica se mantiene inalterada en el 6,50% en Brasil, un país con unos intereses históricamente altos.
Según analistas consultados por el Banco Central, la expectativa es que la inflación para 2018 y 2019 cierre en torno al 4,1%, mientras que para 2020 se espera un porcentaje que ronde el 4,0%.
La tasa básica de interés es el principal instrumento del Banco Central para controlar la inflación, que ha experimentado un descenso sostenido en los últimos años.
En teoría, unos tipos en niveles bajos deben impulsar el crecimiento y animar a los sectores productivos del país, lo que a la postre ayudaría a descender los preocupantes índices de desempleo, que afectó en julio pasado al 12,3% de la población, lo que equivale a casi 13 millones de personas sin trabajo.