
El ministro británico para el Brexit, David Davis, ha anunciado esta noche su dimisión, por la falta de acuerdo con la primera ministra, Theresa May, en sus planes de abandonar la Unión Europea. En un comunicado, Davis ha asegurado que no quería ser un "soldado reticente" en la hoja de ruta de May.
May, cercada por las dimisiones (también la de Boris Johnson), ya ha nombrado a un sustituto: Dominic Raab, hasta ahora ministro de Vivienda y uno de los miembros más destacados de la campaña a favor del Brexit de cara al referéndum de junio de 2016. Todos los ojos están puestos en el ministro de Medio Ambiente, que al igual que los anteriores estaban a favor de un Brexit duro y no uno blanco como el que ha negociado May en los últimos meses.
En su carta de dimisión, Davis ha asegurado que "la dirección general de la política nos dejará en el mejor de los casos con una posición de negociación débil". "En mi opinión, la consecuencia inevitable de las políticas propuestas será hacer que el supuesto control por parte del Parlamento sea más ilusorio que real", ha aseverado en la carta, que ha sido publicada por la oficina de May.
Además, el secretario de Estado para el Brexit, Steve Baker, también ha presentado su dimisión, según han informado fuentes del Gobierno. Otros legisladores conservadores partidarios del Brexit han criticado el llamado "acuerdo de paz", diciendo que los planes de May solo ofrecerían un Brexit solo por su nombre, una traición a lo que vieron como su promesa de una ruptura limpia con la Unión Europea.
"Noticias fantásticas. Bien hecho David Davis por tener las agallas para renunciar", ha señalado la defensora del Brexit y legisladora conservadora Andrea Jenkynns a través de su cuenta en la red social Twitter. "Me quito el sombrero. Necesitamos asegurarnos de que esto sea ahora un factor de cambio para el Brexit", ha añadido.
Fantastic news. Well done David Davis for having the principal and guts to resign. I take my hat off to you. We need to make sure this is now a game changer for #Brexit.
— Andrea Jenkyns MP (@andreajenkyns) 8 de julio de 2018
Después de la reunión en su residencia campestre de Chequers, May parecía haber persuadido a los radicales pro-Brexit del gabinete, incluido Davis, para respaldar su plan de presionar por "una zona de libre comercio de bienes" con la UE y mantener estrechos vínculos comerciales.
Ganó el respaldo de otro partidario del Brexit de alto perfil. Michael Gove, el ministro de Medio Ambiente de May, indicó el domingo que si bien la postura de negociación acordada no era perfecta, consideraba que se había devuelto la gestión al Reino Unido.
Sin embargo, Davis había expresado su inquietud sobre un plan de consenso hasta la víspera de la reunión, escribiendo una carta a May en la que describía su propuesta para facilitar el comercio y darle a Reino Unido más libertad para establecer aranceles como "impracticable".
Davis repite en su estrategia
No es la primera vez que Davis abandona cuando no está de acuerdo con su partido. En 2008, cuando los conservadores no estaban en el gobierno, Davis renunció como miembro del Parlamento para elevar el perfil de un debate sobre la erosión de las libertades civiles que a su juicio se estaba produciendo.
Otros parlamentarios conservadores que apoyan el Brexit han criticado el "acuerdo de paz" de Chequers, diciendo que el Brexit que ofrecía May era solo nominal y constituía una traición respecto a su promesa de una ruptura limpia con la UE.
Estas quejas plantean el interrogante de si May puede lograr respaldo en el Parlamento para sus planes si se llega a un acuerdo con la UE a finales de este año, y algunos sugieren que varios de los que se oponen al plan para el Brexit podrían tratar de desencadenar una contienda por el liderazgo en contra de la primera ministra.
Bruselas quita hierro
¿Qué opina la Comisión Europea? El portavoz comunitario, Margaritis Schinas, ha asegurado que la cascada de dimisiones, en particular la de Davis, no supone un problema para el bando negociador europeo y ha insistido en que éste continuará con el trabajo y la negociación "de buena fe" para alcanzar una acuerdo con Londres en el tiempo establecido.
"No es un problema para nosotros, estamos aquí para trabajar", ha asegurado Schinas. "Continuaremos negociando de buena fe con la primera ministra May y los negociadores de su Gobierno para alcanzar un acuerdo", ha dicho.