
Frenazo de la economía británica. El PIB de Reino Unido registró un avance de sólo el 0,1% en el primer trimestre, lo que supuso el menor ritmo de expansión desde finales de 2012 y una desaceleración de la actividad respecto al 0,4% del cuarto trimestre de 2017. La lectura de principios de año, peor de la esperada por los expertos, provoca un fuerte descenso de la libra en su cruce con el euro y el dólar. La divisa británica cotiza en mínimos de siete semanas.
"Nuestra estimación preliminar muestra que la economía de Reino Unido crece a su menor ritmo en más de cinco años con un crecimiento más débil de las manufacturas y la construcción bajando de manera significativa", indicó Rob Kent-Smith, responsable de contabilidad nacional de ONS, en declaraciones recogidas por la BBC.
"Aunque la nieve tenido algún impacto sobre la economía, particularmente en la construcción y algunos segmentos del comercio minorista, su efecto general fue limitado, con el mal tiempo impulsando el suministro energético y las ventas del comercio electrónico", añadió.
¿Qué implicaciones tendrá este frenazo en la economía? Recientemente el mercado daba por hecha una subida de los tipos de interés en la próxima reunión del Banco de Inglaterra (BoE). Sin embargo, el panorama ha cambiado ante el enfriamiento de la recuperación en la primera parte del año junto con las recientes declaraciones en tono moderado del gobernador del BoE, Mark Carney.
"La sorpresa negativa del PIB es probablemente el último clavo en el ataúd para un posible aumento de las tipos de interés en mayo", indicó Paul Hollingsworth, un economista británico de Capital Economics en Londres. Las apuestas a que el Banco de Inglaterra subiría los tipos han caído a menos de un 25% desde el 56% que se registraba ayer.