
Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda y Función Pública, ha recordado este jueves la preferencia del Gobierno de reducir la jornada laboral a 35 horas para los funcionarios que trabajan a turnos, pero no "generalizarla", si bien se ha mostrado abierto a negociar con los sindicatos de la función pública.
A preguntas de los periodistas en Granada, Montoro ha señalado que el Gobierno está dispuesto a negociar la evolución de las retribuciones de la función pública y las condiciones laborales.
No obstante, ha recordado que los funcionarios que trabajan a turnos son "muchos" y están especialmente presentes en el ámbito de los servicios públicos esenciales, de modo que la preferencia del Gobierno "era haber comenzando con la reducción a 35 horas" para ellos y "no generalizarla".
Horario nocturno
En la misma línea, este miércoles ya había destacado que el Gobierno está dispuesto a reducir la jornada en el sector público, aunque distinguiendo entre aquellos sectores que, por su actividad, tengan turnos de horario nocturno.
En declaraciones a los periodistas en los pasillos del Congreso tras comparecer en la Comisión de Hacienda para informar sobre el nuevo modelo de financiación autonómica, Montoro ha confirmado que el Gobierno ha realizado esta propuesta dentro de la negociación con los sindicatos del sector.
"Mayor penosidad"
El ministro ha justificado esta distinción "por entender que hay mayor penosidad en sectores que están a turno". "Ahí es donde debe irse en términos de reducción de jornada", ha aseverado a los periodistas, a los que ha explicado que tratan de compensar la nocturnidad de muchos de los sectores de la Función Pública.
Las negociaciones forman parte de la actualización de las condiciones laborales de los funcionarios y de los trabajadores del sector público, que ya se iniciaron en septiembre, durante los trabajos para la elaboración de los Presupuestos Generales del Estado.
Al no presentar un proyecto de ley por falta de apoyos políticos en el Congreso, el Gobierno decidió prorrogar las cuentas de 2017 y pospusieron dicha negociación. El contenido de los acuerdos que pudieran llegar a alcanzarse se incluirían en los nuevos Presupuestos, en caso de que el Gobierno decidiera presentarlos y, en caso contrario, a través de decretos ley.