
Las pernoctaciones hoteleras subieron un 1,1% interanual en octubre y sumaron siete meses al alza, una tendencia positiva que no se cumplió en Cataluña, donde retrocedieron un 2,7% en un mes marcado por el envite independentista. Los precios de los hoteles de la región también registraron un retroceso del 0,5%.
La estadística del INE detalla que el aumento total de las pernoctaciones se debió principalmente al impulso de los turistas extranjeros, que subieron un 2,6% frente al descenso del 2,2% de los viajeros residentes. En Cataluña, las pernoctaciones de no residentes bajaron un 2,9%.
Pese al descenso, Cataluña siguió siendo el tercer destino elegido por viajeros no residentes en octubre (15,5% del total), por detrás de Baleares (26,6%) y Canarias (26%), mientras que Barcelona fue el segundo punto turístico de España con más pernoctaciones, sólo superado por Madrid. La estancia media para el total de España bajó sin embargo un 0,9% respecto al mismo periodo del año anterior.
Según los datos en octubre se registraron más de 30 millones de pernoctaciones, cubriéndose el 60,8% de las plazas ofertadas. Respecto al origen de los viajeros, el INE destacó un aumento del 2,1% en las pernoctaciones de los turistas alemanes y un descenso del 2,7% en las de los británicos.
Los precios hoteleros continuaron con su tendencia al alza y subieron un 0,8% en el décimo mes del año frente a octubre de 2016, encadenando 43 meses de subidas. En tanto, la rentabilidad del conjunto de los hoteles españoles por habitación disponible (RevPar, una medida muy seguida por los analistas del sector) se elevó un 6,7 por ciento en octubre a una media de 55,5 euros.
La facturación media diaria de los hoteles por cada habitación ocupada creció un 5,3%, a 81,9 euros. En los hoteles de cinco estrellas la tarifa media alcanzó en octubre los 178,5 euros por habitación.
El sector hotelero español comenzó a experimentar una recuperación en la segunda mitad de 2014 y los empresarios se han mostrado optimistas por el aumento de visitantes estimado para el año, así como por el trasvase de turistas de otros destinos mediterráneos considerados hasta ahora como menos seguros, como Turquía, Egipto y Túnez.
España batió en 2016 por segundo año consecutivo su récord de llegada de turistas con más de 75 millones, casi un 10% más que en 2015, y para este año, las previsiones apuntan a una nueva cifra récord superior a los 80 millones de visitantes extranjeros.