El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco, que instruye el 'caso Lezo' e investiga a Ignacio González por supuestas prácticas corruptas, tiene indicios de que el expresidente de la Comunidad de Madrid pudo haber utilizado a la empresa Subastas Segre, la compañía fundada por su mujer, Lourdes Cavero, imputada también en el caso, para blanquear capitales a través de la venta de obras de arte. El CGPJ investigará si el juez Velasco solicitó trabajo para su mujer a Ignacio González.
Según apuntan fuentes próximas a la investigación, se están analizando al detalle las cuentas y facturas de la empresa desde el año 2004 hasta 2015. Es decir, justo tras el nombramiento de González como vicepresidente en el primer Gobierno de Esperanza Aguirre y hasta su relevo hace casi dos años por Cristina Cifuentes tras las últimas elecciones.
De acuerdo con las cuentas que Subastas Segre ha remitido al Registro Mercantil, durante ese periodo la compañía ha alcanzado una facturación total de 25 millones de euros. Su volumen de negocio, sin embargo, se ha ido resintiendo en los últimos años. El año 2004, de hecho, fue el momento en el que alcanzó las ventas más altas, con 2,77 millones de euros.
Activos de 4,1 millones
En 2015, el último año del que hay cifras disponibles, sus ingresos fueron de 1,78 millones, lo que supone pese a todo un 7,2 por ciento más que en el ejercicio anterior. Subastas Segre suma unos activos totales de 4,1 millones de euros y su beneficio después de impuestos al cierre de 2015, fue de 251.170 euros. De acuerdo con las fuentes consultadas, la UCO, la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil, sospechó desde el primer momento de su operativa, teniendo en cuenta que la distribución y venta de obras de arte, joyas y antigüedades que lleva a cabo desde su constitución en el año 2000 es uno de las vías más utilizadas para el blanqueo de capitales, uno de los principales delitos de los que se acusa a González. Lourdes Cavero es socia en la empresa de Carmen Cafranga, expresidenta de la Fundación Caja Madrid y condenada ya por el uso de las tarjetas black a un año y ocho meses de prisión por apropiación indebida. Cafranga, que se gastó 175.200 euros, es una empresaria muy cercana al PP.
Lourdes Cavero fue investigada (antigua acepción de imputado) por primera vez el 15 de enero de 2014 dentro del caso que trata de esclarecer la adquisición del ya famoso ático de Marbella por parte de ella y de su marido, instrucción dirigida por la titular del Juzgado de Estepona (Málaga), Mariana Peregrina. La Audiencia Provincial de Málaga revocó cuatro meses después la imputación.
Sin embargo, el año pasado la magistrada de Estepona citó a Cavero, González y al presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, en calidad de investigados y pidió a Panamá información bancaria relacionada con el matrimonio.