
Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (Ecofin) acuerdan retrasar a 2020 la aplicación de la reforma contra la evasión fiscal de las multinacionales. Irlanda, Suecia, Dinamarca, Holanda, Reino Unido, Malta y Luxemburgo consiguen aplazar la entrada en vigor y alargar hasta 2022 la aplicación de la norma, pero no evitan que se aprueben limitaciones a tributar en terceros países aprovechando los tipos más bajos. Los países estudian excluir a los fondos de pensiones de la futura 'tasa Tobin'.
La Comisión Europea lleva años proponiéndose poner coto a la optimización fiscal de las grandes compañías, pero las medidas no se terminan de concretar por la oposición de algunos países, que han hecho de su sistema tributario una ventaja competitiva ante otros socios para atraer a grandes empresas.
El Consejo de ministros europeos de Economía y Finanzas (Ecofin) ha aprobado medidas que limitan las multinacionales puedan reducir el pago de impuestos utilizando matrices en países con una menor carga fiscal.
A cambio el bloque de países más reacio a la modificación de normativa, ha conseguido un plazo más largo para la entrada en vigor de las normas, que se retrasa un año, hasta el 1 de enero de 2020 y con periodo de aplicación de dos años.
Irlanda, Suecia, Dinamarca, Holanda, Reino Unido, Malta y Luxemburgo se oponen por diversos motivos endurecer el sistema tributario para tapar la rendijas que utilizan las multinacionales. Además, los ministros de Economía y Finanzas también excluir temporalmente de las normas al al sector bancario del ámbito.
En el tintero, también se ha quedado la norma más ambiciosa la adopción de una base imponible consolidada común del Impuesto de Sociedades (CCCTB, por sus siglas en inglés). Con esta iniciativa obligaría a las compañías a pagar impuestos allí donde facturan.
Según las cifras que maneja Bruselas, la medida afectará a más de 6.000 multinacionales de las que operan en Europa y que representan el 90% de los beneficios de las multinacionales a nivel global.
A pesar de los retrasos, los políticos europeos se han felicitado de los avances. "La UE está en primera línea en la lucha contra la evasión fiscal", subrayó el ministro de Finanzas maltés, Edward Scicluna, cuyo país preside el Consejo de la Unión este semestre.
Por su parte, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, consideró que el acuerdo de hoy es un nuevo "éxito" en la campaña europea "por una fiscalidad más justa" y subrayó que "paso a paso, estamos eliminando los canales utilizados por ciertas empresas para escapar a los impuestos".
Por ello, felicitó a los países por acordar una "medida tangible para frenar los abusos fiscales y establecer un entorno fiscal más justo en la UE".