
En España se firmaron prácticamente 20 millones de contratos el año pasado. En los últimos diez años nunca se había registrado una cifra tan alta, ni cuando la ocupación era mayor que la de ahora. La cifra de contratos ha crecido un 7,5% interanual, casi el doble de lo que ha subido el empleo a lo largo del año pasado. ¿Por qué?
En buena medida, este récord del número de contratos se debe a que cada trabajador no firma uno, sino varios cada ejercicio. Según los datos del Ministerio de Empleo, el número de contratos por ocupado subió un año más, hasta situarse en 1,44 por persona, la cifra más alta de la última década, que son los datos que se recogen en el Ministerio.
Este récord es consecuencia en parte de la caída de la duración media de los contratos. En los once primeros meses del año 2016, duraron de media 51 días, frente a los casi 80 que promediaban antes de la crisis. Una cuarta parte de los contratos de 2016 no llegaron a durar ni una semana, por lo que es lógico que se firmasen una cantidad tan alta de convenios.
Contratos de calidad
Si se comparan estos datos con los de la Encuesta de Población Activa, el resultado es que hay algo más de 11 millones de personas, la mayoría de ellos con contrato indefinido, que llevan más de 2 años en su puesto de trabajo actual. Y, mientras, otros 7 millones de personas tiene una alta rotación y firma varios contratos al año para mantenerse ocupado.
Además, a pesar de la mejoría del empleo, encontrar un trabajo de máxima calidad en 2016 no fue mucho más sencillo que en años anteriores. Según los datos del Ministerio de Empleo, sólo uno de cada veinte contratos firmados en 2016 era indefinido y a tiempo completo. La proporción exacta fue del 4,96%, la más alta desde 2012, pero muy lejos de la que existía antes de la crisis (en 2008 era del 8,65%).
La jornada parcial, que para casi dos terceras partes de los que la tienen no es por su deseo, apenas ha bajado pese al mejor tono del mercado laboral. Según Empleo, de los 1,7 millones de contratos indefinidos que se firmaron en 2016, el 57% era a tiempo completo, una proporción similar a años anteriores, pero 15 puntos menos que en el ejercicio 2008.