
Las manifestaciones organizadas ayer en Francia contra la reforma laboral del Ejecutivo socialista se saldaron con 15 policías y gendarmes heridos en todo el país, dos de ellos graves, y 62 detenciones, informó el Ministerio del Interior.
El comunicado oficial no precisó el número de heridos entre los manifestantes, que llegaron a las 78.000 personas en toda Francia y 13.000 solo en París, según las autoridades, y a las 170.000 y 40.000, respectivamente, según los sindicatos. Cifras que están lejos de las alcanzadas en marzo, cuando 400.000 personas acudieron a las marchas.
Desde el inicio de la protesta sindical a esa ley el pasado marzo, 620 agentes han resultado heridos, añadió el ministerio.
Altercados
Aunque la mayor parte de las 169 manifestaciones de este jueves se desarrollaron sin incidentes, el despliegue de seguridad no pudo evitar altercados en la capital, Nantes, Rennes, Rouen, Grenoble, Toulouse y Montpellier.
En esas ciudades se repitieron los enfrentamientos entre agentes y radicales igual que en anteriores ocasiones, con lanzamientos de cócteles molotov y de gases lacrimógenos.
"Esos actos de violencia son inaceptables", indicó el ministro del Interior, Bernard Cazeneuve, que dijo que 32 de las 62 personas detenidas permanecen retenidas para "responder de sus actos ante la Justicia".
14ª jornada de protesta
Esta decimocuarta jornada de protesta desde el pasado marzo, encabezada de nuevo por la Confederación General del Trabajo (CGT), reclamó la derogación de la ley adoptada en pleno periodo estival y que en su trámite parlamentario evitó el debate y el voto de los diputados.
La reforma, una de las últimas del quinquenio socialista, se ha visto contestada desde que se filtraron en febrero sus primeras disposiciones.
Aunque el Ejecutivo la presenta como una solución contra el paro, los sindicatos denuncian que supone un paso atrás en los derechos adquiridos por los trabajadores.
Durante las protestas contra la reforma, que según los manifestantes facilitará la contratación y el despido, decenas de personas han lanzado botellas, latas y bombas incendiarias caseras contra la Policía, que ha hecho uso de la fuerza para frenar las manifestaciones que, según el presidente del sindicato Fuerza Obrera, están llegando a su fin.
"Ahora estamos levantando el pie del pedal. No vamos a hacer esto todas las semanas", ha señalado Jean Claude Mailly, secretario general del sindicato. "La ley será el chicle que se pegue a las suelas de los zapatos gubernamentales", ha aseverado.
Tanto Mailly como Philippe Martinez, presidente de la Confederación General del Trabajo (CGT), se han mostrado esperanzados ante la posibilidad de que los obstáculos legales fuercen al Gobierno a descartar la reforma. La nueva ley está diseñada para hacer del sistema laboral un mecanismo más flexible.
Vuelos suspendidos
Las aerolíneas que operan en España han tenido que cancelar este jueves, hasta las 19.00 horas, un total de 66 vuelos como consecuencia de la huelga de controladores aéreos en Francia.
Según informaron fuentes de Aena, de los 292 vuelos programados con origen o destino en Francia para la jornada se habían cancelado a esa hora 13. Además, de los 2.916 vuelos programados con otros países se habían cancelado 53 hasta esa hora.
La huelga de controladores comenzó el miércoles por la tarde y está previsto que se prolongue hasta el viernes por la mañana.