
Mario Conde utilizó Barnacla, cuya matriz es la suiza Galloix, para "garantizarse un ahorro fiscal muy importante por sus actividades personales, al servirle de pantalla para tributar a través de la sociedad en vez de hacerlo en su propio IRPF", según el auto dictado ayer por el juez Pedraz.
Conde defraudó los ingresos de Planeta -un total de 694.542 euros- por el libro Los Días de Gloria, los derivados de su colaboración como tertuliano de Intereconomía -tenía una nómina mensual de 3.480 euros mensuales en 2010 y de 3.540 euros entre 2011 y 2012-; los ingresos de 59.000 euros que cobró el 17 de abril de 2012 de la sociedad Lorenzo Producciones, por el rodaje de la serie Mario Conde, los días de gloria.
Pero Conde ha utilizado Barnacla no sólo para evitar el pago del IRPF, sino también, para el pago de gastos y nónimas estrictamente personales. Así, la firma se hizo cargo del pago del alquiler de un pazo en Chaguazoso, en la provincia de Orense, de pagos de obras, o de las nóminas de testaferros y empleados del hogar.
La Agencia Tributaria ha puesto en marcha, mientras tanto, su engranaje para recuperar los 9,9 millones de euros que debe el exbanquero, que se declaró insolvente ante la Justicia en el año 2002, fecha en la que fue condenado a 20 años de prisión (sólo cumplió seis) por apropiación indebida en el caso Banesto.
El que fue presidente de la entidad es el segundo mayor moroso del país, según el listado publicado por la Agencia Tributaria el pasado mes de diciembre. El primer lugar lo ocupa el empresario Agapito García Sánchez. Hacienda tiene a partir de ahora dos vías para localizar el dinero y que son las habituales para cobrar deudas en este tipo de casos