El ministro de Justicia, Rafael Catalá, participa hoy en la nueva edición de El Ágora de elEconomista. En el inicio de su intervención, ha resaltado la etapa "relevante y trascendente" ante la que se encuentra España y ha defendido el trabajo desarrollado por el Gobierno "en estos años intensísimos".
"Todo está orientado al mantenimiento del desarrollo de la sociedad del bienestar", afirmó el titular de la cartera de Justicia, quien añadió que se están registrando avances en la recuperación, algo que "todos los indicadores ponen de manifiesto". "El consumo sigue avanzando, el paro bajando, la formalización de hipotecas está creciendo...", señaló.
El ministro ha aprovechado también para hacer hincapié en la lucha contra la corrupción. Según ha explicado, que se hayan destapado los distintos procesos que ahora se investigan se debe a que la Justicia funciona, "porque sentencia a todos sin distinción". "Son unas pocas decenas de casos las que nos han escandalizado y nos han generado la máxima repulsa", ha manifestado, para añadir que hay que fortalecer el Estado de derecho para evitar que en el futuro puedan surgir nuevos casos.
En cuanto al sistema judicial, ha defendido que los asuntos "sencillos" se resuelven en plazos razonables. "Son tiempos excelentes", ha destacado Catalá, quien ha asegurado que la percepción de que la justicia es "lenta" se debe a que las macrocausas atascan los juzgados. "Quiero acabar con esa imagen y estamos trabajando para seguir agilizando las jurisdicciones que más tardan", afirmó.
En este sentido, el ministro de Justicia ha asegurado que una de las medidas que se ha tomado para mejorar la eficiencia en los juzgados es la digitalización. "Desde el 1 de enero todas las comunicaciones con los juzgados serán exclusivamente telemáticas", señaló. "No podemos seguir en la cultura del papel porque en la balanza entre la seguridad y la eficiencia hemos mirado durante mucho tiempo a la primera parte del platillo y hemos abandonado la mejora y la digitalización", indicó durante su intervención en El Ágora de elEconomista.
Además, ha abordado la cuestión del registro civil, que ve "razonable" que no requiera la intervención del juez. Según explicó, aunque aún no han tomado ninguna decisión, del departamento que coordina ve claro que "no tiene sentido que tengamos a los ciudadanos haciendo colas en los registros para inscribir nacimientos o defunciones". "Por parte de los propios registradores ha habido tensión, nos estaban empezando a poner la cabeza como un bombo con la llevanza de los registros", ha añadido.