El Índice de Precios de Consumo (IPC) experimentó un aumento de nueve décimas en marzo respecto al mes anterior, lo que elevó una décima la tasa interanual hasta el 4,5%, la más alta desde julio de 1995. A pesar de ello, está por debajo de las previsiones ya que los analistas habían pronosticado un dato anual del 4,6%.
De esta forma, la inflación continúa la senda alcista que comenzó el pasado verano y se sitúa por encima del 4% por quinto mes consecutivo, regresando así a los niveles registrados en el año 1995, cuando el IPC llegó, incluso, a superar el 5% en tasa interanual.
Según los datos hechos públicos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación subyacente (que no incluye los precios de los productos energéticos ni de los alimentos no elaborados) subió un 0,7% respecto a febrero y la tasa interanual avanzó una décima hasta el 3,4%, la más alta desde diciembre de 2002.
Previsiones
"El dato salió en línea con lo que esperábamos, en particular la inflación subyacente que tiene un repunte de una décima", comenta Diego Fernández, economista de Fortis. "Vemos difícil que haya una moderación de inflación en los próximos meses. En el cuarto trimestre veríamos alguna bajada significativa pero, de momento, hay riesgos de un repunte adicional en los próximos meses o a mitad de año", añade.
José Luis Martínez, estratega de Citigroup, estima tras conocer los datos de hoy que la inflación permanecerá relativamente estable cerca de los niveles actuales hasta el cuarto trimestre, "cuando veríamos un descenso del crecimiento anual a niveles del 3%".
El secretario de Estado de Economía en funciones, David Vegara, se ha mostrado hoy convencido de que la inflación empezará a moderarse en el mes de abril y de que se situará en el entorno del 3% a finales de año, si los precios de los productos energéticos y de los cereales no registran nuevos incrementos en los mercados internacionales.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) espera, según su informe Perspectivas Económicas Mundiales (WEO, por sus siglas en ingles) publicado esta semana, una inflación para la economía española del 4% en promedio del año.
Los sectores más inflacionistas
El aumento de nueve décimas de los precios en marzo respecto a febrero se ha debido principalmente al encarecimiento del 3,4% en el vestido y calzado, que recoge el comportamiento de los precios en el inicio de la temporada de primavera-verano.
En cuanto a las tasas anuales, la inflación de los alimentos elaborados se mantiene en niveles de 7,4 %, medio punto por encima de los niveles de diciembre. En el caso de los alimentos sin elaborar, moderan su inflación anual hasta niveles del 4,7 % desde el 5,2 % anterior, su segundo descenso mensual consecutivo.
En el caso de los precios de la energía, su encarecimiento respecto al mismo mes de 2007 asciende al 14,1% frente a la tasa anual del 13,3% anterior. Pero los economistas consideran especialmente inquietante el repunte de dos decimales en la inflación de servicios hasta el 4%, el nivel más alto desde mayo del año pasado.