
El Gobierno del Reino Unido está estudiando un impuesto temporal que grave las ganancias de los bancos y que podría recaudar unos 1.000 millones de libras anuales (1.100 millones de euros), informó hoy la cadena pública BBC.
Según el director de la sección de economía de la BBC, Robert Peston, que cita fuentes ministeriales, el Tesoro británico baraja varias opciones, entre ellas un "superimpuesto" a los banqueros que reciban retribuciones de un cierto nivel.
Otras ideas que se analizan es aumentar el impuesto de la seguridad social de los empleados de bancos que paguen grandes primas o gravar directamente las inversiones de las entidades bancarias.
El impuesto en cuestión se aplicaría durante dos o tres años y afectaría no sólo a bancos del Reino Unido, como Barclays, HSBC o Royal Bank Of Scotland (RBS), sino también a las filiales británicas de firmas extranjeras como Goldman Sachs, JP Morgan o Deutsche Bank.
Un anuncio de la medida adoptada finalmente podría hacerse este miércoles, cuando el ministro de Economía, Alistair Darling, presentará un adelanto de los presupuestos generales del Estado para el próximo ejercicio, según la BBC.
"Es cuestión de justicia. Los bancos de inversión están ganando beneficios excepcionales como resultado de la intervención del Gobierno y el Banco de Inglaterra para limitar el daño económico del lío que causaron esos mismos bancos (en la crisis crediticia de 2008)", comentó un ministro cuyo nombre no divulga la cadena.
"Por tanto -agregó esa fuente gubernamental- sería escandaloso que (los bancos) dedicasen esos beneficios a sus empleados y las primas. Estamos dispuestos a impedirlo".
La medida no pretende debilitar a las entidades bancarias
Con todo, el Tesoro no quiere debilitar el poder de capital los bancos en un momento en que necesitan fortalecerse ante eventuales pérdidas en el futuro.
"No podemos imponer un impuesto que debilite el capital de los bancos. Lo que hagamos debe ser neutral respecto a sus recursos de capital", agregó un miembro del Gobierno que habló con la BBC bajo condición de anonimato.
La banca ha recibido en este país unas ayudas de 850.000 millones de libras (935.000 millones de euros) en forma de préstamos, garantías, seguros e inversión procedentes del contribuyente.
Asimismo, los bancos han visto crecer sus beneficios de forma artificial como consecuencia indirecta de las rebajas de tipos de interés y la puesta en circulación de dinero nuevo por valor de 200.000 millones de libras (220.000 millones de euros).