
Es una de las frases más repetidas y recurrente a la hora de valorar el dinero como recuso económico, haciendo referencia a que no se trata de algo infinito ni tampoco se obtiene de manera sencilla. Que el dinero no crece ni cae de los árboles es casi evidente, aunque un reciente estudio por parte de la Organización de Investigación Científica e Industrial de la Commonwealth (CSIRO), en Australia, y publicado en la revista Nature, pone en jaque, al menos, la obtención del oro.
Gracias a la investigación se ha descubierto que los eucaliptos, una de las especies arbóreas natales del país oceánico y conocida por su rápido crecimiento y sus propiedades medicinales, es capaz de absorber particular de oro del suelo y transpórtalas hasta sus propias hojas. Un descubrimiento que gusta especialmente en Galicia donde, desde finales del s. XIX, abundan los eucaliptos, aunque su presencia lleva décadas provocando consecuencias negativas para el entorno y la biodiversidad de la región española.
Aun así, el nuevo hallazgo se suma a la rica tradición geológica de Galicia, donde ya existen registros del gran potencial aurífero de la zona, que también incluye las grandes minas romanas de las Médulas de León y el reciente descubrimiento de oro en el pueblo asturiano de Tapia de Casariego, donde se cree que puede haber hasta 30 toneladas.
40 metros de raíces para absorber metales preciosos
El estudio publicado en la revista Nature, y llevado a cabo por el CSIRO, revela que algunos árboles tienen la capacidad, a través de sus raíces, de absorber minerales del suelo, incluidos metales pesados y, efectivamente, partículas de oro.
Especialmente, la investigación se centra en el eucalipto, puesto que sus raíces pueden llegar alcanzar los 40 metros, de las más largas del reino vegetal, lo que sin duda le permite llegar a ciertos sustratos y minerales fuera del alcance de la mayoría de las plantas. Según el experto al frente del estudio, el Dr.Melvin Linter, "los eucaliptos actúan como bombas naturales, extrayendo agua y minerales desde grandes profundidades". De esta manera es cómo las nanopartículas de oro, disueltas en las aguas subterráneas, pueden llegar hasta las mismas hojas del eucalipto, logrando que el dinero 'crezca de los árboles'.
No obstante, la cantidad que se podría extraer sería minúscula, casi ínfima, aunque esto abriría la puerta a la investigación de nuevas técnicas de prospección mineral para poder hallar metales preciosos en el subsuelo sin necesidad de procedimientos invasivos, como sí lo son la minería a cielo abierto o la minería subterránea.
Galicia sería el epicentro de las investigaciones en Europa
Galicia es la región con más bosques de eucaliptos de España, e incluso se podría decir que también de Europa. Esto se debe a la introducción de la especie arbórea natural de Australia durante los últimos años del s. XIX con fines industriales, sobre todo para la industria papelera por su rápido crecimiento. Durante las últimas décadas, el eucalipto se ha extendido sobre todo en las provincias de A Coruña, Pontevedra y Lugo, aunque también por áreas de Asturias y Cantabria, llegando a considerarse una especie invasora, ya que ha desplazado a otras especies autóctonas como el roble y el castaño.

Es por eso por lo que el crecimiento descontrolado ha provocado un replanteamiento y reducción de su presencia, si bien algunos sectores económicos como la industria papelera siguen defendiendo su expansión por la región dado su valor productivo. Ahora, con el descubrimiento de la presencia de oro el debate se vuelve más complejo.
De un lado, el desarrollo de posibles técnicas de geoquímica vegetal podría revelar una valiosa herramienta para el impulso económico y tecnológico de la zona: Galicia podría convertirse en un terreno fértil para las investigaciones en Europa y convertirse en un referente continental en técnicas de exploración sostenible. Pero, su continúa proliferación casi 'a salvajada' podría poner en peligro aún más la biodiversidad local.
Eucalipto como 'rastreador de oro'
El rally del oro en los últimos años, llegando a super incluso los 3.300 dólares la onza, ha levantado una nueva fiebre del metal precioso a pesar incluso de los vaivenes y tensiones geopolíticas. Y para muestra, el 'botón' del eucalipto.
Históricamente, el oro ha sido un valor refugio en los mercados internacionales, y este descubrimiento tener varias ramificaciones: desde una económica para el sector hasta otra de desarrollo de industrias auxiliares como servicios, tecnología ambiental, investigación, etc.
No obstante, cabe recalcar que la cantidad de oro en las hojas de los eucaliptos sería tan baja que el fin último no sería recolectar el dinero que cae de los árboles, sino usar esta especie arbórea como un 'rastreador de oro' para localizar nuevos grandes hallazgos, también de otros metales precioso. De esta manera desaparecerían otras técnicas más invasivas como la excavación y la tala; tan solo la bioexploración con el análisis de las hojas de estos árboles que podría combinarse con tecnología geológica ya desarrolla y el uso de satélites, drones y análisis espectral.