
La Cumbre de la OTAN en La Haya tiene como objetivo conseguir un compromiso para que los países eleven el gasto hasta el 5% del PIB. Una idea que genera reticencias entre algunos de los aliados, como es el caso manifiesto de España. Sin embargo, el secretario general de la Alianza Atlántica, Mark Rutte, asegura que hay una comprensión amplia de la situación, que la sociedad lo entiende, porque ya no vivimos en "happyland", sino en un momento histórico "mucho más peligroso".
"Hay una clara amenaza de Rusia. Si no invertimos ahora corremos el riesgo de que los rusos intenten algo contra el territorio OTAN en, al menos, cinco, seis o siete años. Y por tanto veo un amplio apoyo", ha asegurado el exprimer ministro holandés.
"Hay un cambio. Ya no vivimos en happyland", ha afirmado Rutte. "Vivimos unos momentos mucho más peligrosos. Hay enemigos y adversarios que pueden querer atacarnos. Debemos asegurarnos de que defendemos nuestro bonito estilo de vida, ciudadanos y valores", justificó la necesidad de incrementar la partida en defensa.
El incremento de gasto militar es el tema que centra el encuentro de la Alianza Atlántica. En este sentido, Rutte ha señalado durante el Public Forum, evento en los márgenes de la cumbre de líderes de La Haya, que los europeos y canadienses deben incrementar su inversión en este segmento. Ha puesto sobre la mesa que lo que Washington quiere es igualar las contribuciones con lo que EEUU está aportando. "En lo que se refiere a este 5%, EEUU está ahí", ha asegurado Rutte.
Sin embargo, ha puesto el énfasis en que la principal razón para llegar a este objetivo es la amenaza rusa. "Mi mensaje a mis colegas europeos es que dejen de preocuparse tanto. Empezad a aseguraros de que se hacen planes de inversión, de que se pone en marcha la base industrial y de que el apoyo a Ucrania se mantiene en un nivel alto", ha apuntado el holandés. "Dejad de dar vueltas preocupados por Estados Unidos", ha incidido.
"Alemania ha más que duplicado el dinero que dedica a defensa, comparando 2021 con 2029, cerca de 70.000 millones hasta 150.000 millones", ha afirmado el ex primer ministro holandés, que ha agregado que un solo país de la OTAN ha hecho esto.
"Sabemos que países como Polonia, Estonia, Letonia, Lituania, Finlandia están muy cerca del umbral, del 3,5%, y muchos otros seguirán el mismo camino", ha apuntado en su intervención Rutte también en referencia a Noruega. "Ahora la industria de defensa sabe lo que necesitamos", ha incidido el secretario general de la Alianza Atlántica poniendo sobre la mesa la necesidad la necesidad de determinar las capacidades necesarias.
"Los rusos están haciendo lo mismo", ha recordado el holandés. "Produce en tres meses lo que la OTAN produce en un año y son veinticinco veces más pequeños como economía que la economía al completo de la OTAN". Una situación que Rutte considera que no es sostenible, ya que se necesita munición, tecnología e inteligencia artificial.
El compromiso que se pretende extraer del encuentro en La Haya es que los aliados elevarán el gasto en defensa hasta el 5% del PIB, en principio, hasta un horizonte de 2032. La fórmula para ello se reparte en 3,5% de gasto militar puro, como munición y tanques, y otro 1,5% en gasto militar blando, que implicaría ciberseguridad o infraestructuras críticas.
España manifestó abiertamente su intención de desmarcarse de tales objetivos. El Gobierno planteaba en varias cartas a Rutte que solo podría elevar el gasto al 2,1%, anclando su argumentación en el despliegue de tropas en el flanco este o el ritmo de crecimiento de la economía española. Si el Ejecutivo de Sánchez anunciaba una excepción para Madrid sin objetivos porcentuales, el secretario general de la OTAN salía el lunes al paso para desmentir tal información. Incidía en que todos los países deben llegar a ese 3,5% del PIB, incluido España.