La patronal de las pequeñas y medianas empresas integrada en CEOE, Cepyme, reunirá este miércoles a sus órganos directivos por primera vez desde las elecciones. La nueva presidenta, Ángela de Miguel, ha citado al Comité Ejecutivo que integraba su lista electoral y a la Junta Directiva, en la que no se han producido cambios tras los comicios. Según ha podido saber elEconomista.es, este segundo foro decidirá si la líder de la organización empresarial percibirá una remuneración por asumir esta responsabilidad, cuya cuantía se fijaría en julio.
La abogada vallisoletana ya había transmitido durante la campaña electoral su intención de recibir una compensación económica por asumir las funciones relacionadas con la presidencia de Cepyme. De Miguel defiende que este modelo es más transparente que recibir dietas o pasar gastos de hotel, puesto que así todos los miembros de Cepyme sabrán exactamente qué cantidad percibe y podrán pronunciarse al respecto. Así lo transmitió en la entrevista concedida a este periódico días antes de las elecciones.
La propuesta de remuneración de la presidenta de Cepyme fue incluida en el orden del día de la cita de la Junta Directiva a finales de la semana pasada, como el quinto punto a tratar, según apuntan fuentes empresariales, ya que la primera versión remitida a los integrantes del órgano directivo no incluía este aspecto. La iniciativa se refiere al artículo 22 de los Estatutos de la organización, que reserva a Junta la potestad de "decidir en cada momento si al presidente con cargo vigente le corresponde una retribución por el desempeño de sus funciones".
Si esta votación concluye con un resultado favorable, le corresponderá al Comité Ejecutivo "decidir la cuantía de la retribución" a propuesta de la Comisión de Control Presupuestario y Financiero, que se constituirá esta misma semana. Fuentes empresariales explican que la intención es llevar esta decisión a una reunión que tendrá lugar en el mes de julio, una vez se haya revisado el estado de las cuentas de la organización empresarial.
A la espera de conocer qué postura adoptan los representantes de la patronal sobre este salario, su aprobación supondría un cambio en el presupuesto aplicado en los últimos años. El expresidente, Gerardo Cuerva, había renunciado a percibir la remuneración que sí había recibido el ahora responsable de CEOE, Antonio Garamendi, cuando ocupaba el mismo puesto por estas labores de representación. El dirigente vasco llevó en 2017 al Comité Ejecutivo una propuesta para elevar a 120.000 euros esta compensación en concepto de dietas por la dedicación exclusiva a la organización, que fue aceptada. Esta es, por tanto, la última referencia disponible que podría ser actualizada con el IPC acumulado.
Las fuentes consultadas no se atreven a anticipar en qué sentido se pronunciará el órgano directivo que hasta meses antes de las elecciones había respaldado por unanimidad las iniciativas impulsadas por el granadino Cuerva. Este foro también mostró un respaldo mayoritario a los intentos del expresidente de modificar el sistema de elección de la organización para impedir la delegación indefinida de votos, que contaron con el rechazo del Comité y abrieron una brecha en la patronal de las pymes.
De Miguel cuenta con el aval de haber resultado vencedora en las elecciones del pasado 20 de mayo, pese a que la diferencia fuese de apenas 30 apoyos, por lo que estas fuentes reconocen tener dudas de si alguno de los vocales que en anteriores ocasiones se han expresado en contra de que la presidencia de Cepyme tenga una remuneración alzará la voz en esta reunión. En los pasillos de Diego de León 50 impera la percepción de que los miembros de la patronal dan por superada la fase del enfrentamiento electoral y quieren centrarse en los retos que afrontan sus compañías en el medio plazo.
La intención de De Miguel de recibir una compensación por estas funciones había sido uno de los puntos más criticados por la candidatura de Cuerva, que calificó a la también vicepresidenta de CEOE como "funcionaria" por buscar una ocupación de ocho horas para cinco días a la semana, a lo que la actual presidenta de Cepyme contestó que su intención era dedicar 60, 70 u 80 horas a la semana como entendía que necesitaban las pymes en un contexto laboral y normativo tan complicado como el actual. Además, defendió en diferentes entrevistas que el debate del salario no tendría que suscitar una polémica en el seno de la organización y que la cuantía no era algo que le preocupara especialmente, dado que daba por hecho que sería mucho inferior a lo que percibiría en un despacho de abogados.
La votación de los diferentes puntos del orden del día servirán como termómetro de los ánimos con los que inician esta nueva etapa los miembros de Cepyme. La organización ratificará el acta de la reunión del pasado 22 de abril, el cese de Luis Aribayos comosecretario general de la patronal y el nombramiento de Fermín Albaladejo (CEAJE) en su lugar. De Miguel ha transmitido su voluntad de hacer una transición gradual en los equipos y evitar una ruptura brusca con lo realizado hasta ahora.