
Ocho de cada diez niños vulnerables no van a campamentos de verano donde se les garantiza una comida, según ha advertido la ONG Educo. La organización también recuerda que en España más de 550.000 niños y adolescentes (6,9%) no pueden comer carne, pollo, pescado o su equivalente en proteína vegetal cada dos días, como recoge la Encuesta de Condiciones de Vida del INE. "Es los últimos 20 años, este número se ha multiplicado por cuatro".
En concreto, la organización ha denunciado que, durante los 80 días que duran las vacaciones de verano, uno de cada cinco niños (21,71%) que vive en hogares de nivel socioeconómico bajo va a campamentos o similares en los que se le asegura la comida. Mientras, en el caso de los que pertenecen a familias con mayor nivel socioeconómico, la cifra sube casi 13 puntos, hasta el 34,02%.
Esta es una de las conclusiones de la encuesta representativa que ha realizado la ONG a 2.316 familias con hijos entre 6 y 13 años. El sondeo también muestra que en los hogares de nivel socioeconómico bajo alrededor del 20% de niños va a actividades que no incluyen alimentación y casi el 60% no participa en campamentos.
Educo también ha destacado que, en España, unos 900.000 alumnos perciben ayudas y becas para ir al comedor escolar. Si bien, avisa de que estas no llegan a toda la infancia que las necesita, no cubren todo el coste y desaparecen en junio al acabar las clases hasta la vuelta a las aulas, en septiembre.
En este caso, expone que uno de cada tres niños (36,2%) que recibe beca comedor durante el curso escolar va a campamentos o actividades de verano donde se asegura su alimentación. El 18% restante va unas horas por la mañana sin comer y alrededor del 45% no participan en ninguna.
La directora general de Educo, Pilar Orenes, ha indicado que "la alimentación de la infancia más vulnerable, reciba o no ayudas para el comedor escolar, no está asegurada durante los casi tres meses de vacaciones estivales". Así, ha añadido que aquellos que van a campamentos o similares que incluyen la comida, sean del nivel socioeconómico que sean, lo hacen por un periodo medio de 15 días.
Orenes ha urgido a garantizar que todos los niños y adolescentes en riesgo de pobreza y exclusión tengan asegurada su alimentación durante todo el año, incluido el verano. "Una primera medida puede ser que quienes reciben la beca comedor durante el curso también tengan este apoyo en verano", ha propuesto.