
Doble acuerdo del Institut Català de Finances (ICF) para financiar la construcción y rehabilitación de equipamientos sociales, fundamentalmente para aumentar la dotación de plazas residenciales. La banca pública de la Generalitat de Cataluña ha cerrado dos préstamos con distintas instituciones de alcance europeo. Por un lado, ha firmado un préstamo de 100 millones de euros con el Banco Europeo de Inversiones (BEI). Se trata del primer tramo de una operación valorada en 150 millones. Además, el ICF ha cerrado otro préstamo de 50 millones con el Banco de Desarrollo del Consejo de Europa (BDCE).
"Los acuerdos permitirán al ICF financiar organizaciones sociales sin ánimo de lucro, fundaciones, administraciones locales y empresas públicas y privadas, movilizando hasta 400 millones de euros de inversión para proyectos de infraestructuras sociales en la región", ha explicado la entidad en un comunicado. En concreto, el dinero se destinará a la edificación y reforma de activos para gente mayor, como geriátricos, centros de día y viviendas asistidas, así como a otro tipo de equipamientos para personas con discapacidad y otros colectivos vulnerables.
Se espera que el volumen de financiación proporcionado por la alianza entre el ICF, el BEI y el BDCE sea capaz de crear unas 7.500 nuevas plazas de atención residencial en Cataluña. Todos los proyectos financiados deberán cumplir las normas europeas de construcción sostenible y, en concreto, los requisitos para los edificios de consumo energético próximos a cero.
La consejera delegada de la banca pública catalana, Vanessa Servera, ha definido el acuerdo como "un nuevo ejemplo de cooperación publico-privada de éxito", destacando que ambas instituciones europeas aportan los recursos financieros mientras que el ICF "asume la gestión y el riesgo financiero, y las entidades públicas y otros actores ponen en marcha los proyectos y las inversiones que la red catalana de servicios sociales necesita para afrontar los retos actuales y futuros".
Por su parte, la jefa de la División de Sector Público del BEI en España, María Serrano, ha comentado que seguirán reforzando su "compromiso" con las infraestructuras sociales que precisa la ciudadanía europea. "Este importante acuerdo de financiación con el ICF ayudará a consolidar y aumentar la oferta de instalaciones asistenciales para gente mayor y personas dependientes", ha añadido. En la misma línea, la responsable del BDCE en España, María Sigüenza, ha subrayado la apuesta por la "inclusión social y la reducción de las desigualdades" y el carácter "multilateral" de la negociación.
En 2024, el ICF movilizó casi 850 millones de euros a través de su actividad en préstamos, avales y capital riesgo, lo cual supuso un incremento del 32% respecto al año anterior. En total, la entidad financió a 1.694 organizaciones, de las cuales el 97% fueron pymes y emprendedores.