
El Gobierno asegura que pondrá en marcha antes de que llegue el verano un plan nacional para el desarrollo e impulso de la tecnología y la industria de la seguridad y la defensa españolas. Así lo ha anunciado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en su comparecencia esta mañana para informar sobre el último Consejo Europeo y cómo España atenderá a la demanda de aumentar el gasto militar. Sin embargo, el presidente no ha trasladado el detalle de cómo aumentará dicho gasto ni las medidas específicas del plan, aunque si ha incidido en que "no se hará en detrimento del estado de bienestar". Es decir, no implicará recortes en las partidas de gasto social o medioambiental.
El presidente, por otro lado, sí ha comunicado que su posición respecto a la financiación del aumento del gasto en Defensa es que se utilicen transferencias de fondos. Es decir, con un mecanismo similar al de los fondos Next Generation impulsados tras la pandemia para garantizar la recuperación económica. En este sentido, indicó que así se lo ha trasladado a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, pero "no todos los países comparten este enfoque".
"No es una batalla para que España o los países del sur tengamos más transferencias", afirmó, ya que la mayoría de estos fondos irían a otras naciones, aunque defendió que es la "mejor manera" de poder "equilibrar" todo lo que tiene que ver "con la sostenibilidad financiera y dar respuesta a estas necesidades mayores de seguridad y de defensa".
El jefe del Ejecutivo también defendió que los europeos deben "poner en común" sus políticas de seguridad y defensa, con instrumentos como los "instrumentos de financiación únicos" o las "compras conjuntas" de material.
Cuánto y cómo
Sánchez ha informado al Congreso sobre que, en el último Consejo Europeo, se establecieron tres planos en los que trabajar: política exterior, seguridad y defensa, y competitividad. Según el presidente del Gobierno la solución pasa por reforzar las Naciones Unidas -y por ende la diplomacia-, la integración militar europea y creando un laboratorio para la competitividad. El cuánto y el cómo, sin embargo, todavía no están claros. Se están debatiendo.
Tal y como ha expuesto el presidente, las propuestas entre los países de la UE se encuentran en un rango entre el 2 y el 5% del PIB. Decir una cifra ahora sería "especular". Pero sí ha asegurado que se comprometerá con el 2% prometido por España a la OTAN durante la legislatura de Rajoy.
En cuanto a las propuestas formuladas por la presidenta de la Comisión Europea, Sánchez ha dicho que España ve con "buenos ojos" el fondo SAFE - dotado con 150.000 millones de euros para préstamos para invertir en defensa-, que se permita activar la cláusula de escape para no incluir en la deuda el incremento del gasto en seguridad y defensa, el nuevo rol que se dará al Banco Europeo de Inversiones (BEI) y que se permita emplear fondos estructurales, aunque ha dejado claro que España no recurrirá a esta vía
Según Sánchez, estas cuestiones se van a concretar en las próximas semanas. Entonces comunicará la senda estatal de inversión.
Un ejército europeo
Asimismo, ha añadido, "lo que debemos hacer es crear el ejército europeo". "Unas fuerzas armadas comunitarias, integradas por 27 países y guiadas por la misma bandera y por los mismos intereses", ha sostenido.
Para Sánchez, "solo así nos convertiremos en una verdadera unión y garantizaremos una paz duradera en nuestra región". El presidente del Gobierno ha recordado que ya los padres fundadores de la UE plantearon la idea de una "comunidad europea de la defensa" que sin embargo quedó aparcada con el tiempo.
La carencia de una política de defensa común no era una prioridad hasta hace poco pero las circunstancias han cambiado. "Debemos superar el bloqueo de la melancolía y adaptarnos a esta nueva situación, por muy descorazonadora que sea" porque, ha subrayado Sánchez, los europeos no pueden seguir asumiendo que "nos van a proteger nuestros cielos, nuestras infraestructuras o nuestras fronteras". "Tendremos que hacerlo nosotros y debemos hacerlo de forma inteligente, eficaz y coordinada", ha esgrimido, incidiendo en que "el momento es ahora" y de ahí el debate en el que se encuentra inmersa en estos momentos la UE y que aún no ha concluido.
Respuesta a los aranceles
En otro orden de cosas, el presidente del Ejecutivo también a hablado sobre la situación comercial con Estados Unidos. aunque tampoco ha especificado las medidas concretas, Sánchez ha anunciado que el Gobierno está preparando un plan de contingencia para ayudar a los sectores que se podrían ver afectados en caso de que la Administración de Donald Trump siga adelante con sus planes de introducir aranceles.
En línea con lo que ha venido sosteniendo desde que Trump anunció sus planes de imponer aranceles a la UE tras su vuelta a la Casa Blanca, Sánchez ha insistido en que no es deseable una guerra comercial pero Bruselas, que es quien tiene las competencias comerciales, dará la respuesta necesaria. La UE, ha dicho el presidente, "es una potencia y responderá como una potencia". "Es evidente que no queremos una guerra comercial, pero si tenemos que dar esa guerra comercial, estamos preparados para librarla", ha recalcado.