Trump vuelve a golpear a Canadá y México con los aranceles del 25% al acero y al aluminio

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, vuelve con una nueva ofensiva arancelaria, esta vez en diferido, para Canadá y México. Los aranceles del 25% que el magnate impuso este lunes a todo el acero y el aluminio que entre en Estados Unidos afectará enormemente a sus vecinos con los que tiene un tratado de libre comercio, ya que ambos son sus principales proveedores de estas materias primas.

A priori, se podría pensar que China sería la gran afectada por este nuevo golpe tarifario a las importaciones, ya que es el principal productor de acero del mundo y Donald Trump tiene encarada una guerra comercial hacia el gigante asiático. Pero en el año 2018, durante su anterior mandato, ya había impuesto aranceles al acero chino, por lo que su cuota de mercado se redujo al 1,8% del total importado.

Así, según los últimos datos recogidos por el Observatorio de Complejidad Económica y el Departamento de Comercio de los Estados Unidos, las importaciones de acero y sus derivados sumaron, aproximadamente, 36.000 millones de dólares y de aluminio y derivados, 10.500 millones de dólares. De ese total, 13.900 millones (5.400 millones en aluminio y 8.500 millones en acero) salieron de las fronteras canadienses. Por su parte, de México se exportaron 6.000 millones en acero y sus manufacturas y 1.200 millones de aluminio.

Es decir, aproximadamente la cuarta parte de todo el acero que utilizan las industrias estadounidenses para fabricar sus productos procede de México y Canadá, así como de países aliados como Japón o Corea del Sur. En el caso de Europa, Alemania es su principal proveedor de acero, sumando 1.250 millones de dólares en 2024 y España, en menor medida, sumó 371 millones.

La industria estadounidense depende mucho de las importaciones de estas materias primas. La mayoría del aluminio que utilizan proviene de Canadá. En concreto, según los datos del Departamento de Comercio, el año pasado las importaciones de acero canadienses fueron de 3,2 millones de toneladas, duplicando al resto de países proveedores.

Por su parte, según los datos del Gobierno de México, en el año 2023 exportaron aluminio por valor de 146 millones de dólares, de los cuales 104 millones de dólares se lo vendieron a Estados Unidos. Por otro lado, importaron aluminio por valor de 2.647 millones de dólares y 551 millones procedían de sus vecinos del norte.

Estas cifras quieren decir que aproximadamente el 79% de las importaciones de aluminio de Estados Unidos traspasaron la frontera norte del país. Esto incluye tanto el aluminio en bruto como los procesados. En este sentido, el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-Mec) fue facilitó el comercio de estas materias primas esenciales entre estos tres países. Pero eso no pareció importar a Trump. En un viaje con periodistas en el 'Air Force One', aseguró que "Cualquier acero que venga a Estados Unidos va a tener que tener un 25% de arancel. También el aluminio. 25% para los dos". Preguntado por México y Canadá, recalcó que afecta a "todos, sin expeción".

Las siguientes fuentes de suministro de aluminio son Emiratos Árabes Unidos y China, con 347.034 y 222.872 toneladas, respectivamente. Pero la industria de fundición de aluminio de Estados Unidos es relativamente pequeña en comparación con los estándares mundiales. La capacidad total de fundición del país fue de apenas el 1,73% del total mundial, según el Servicio Geológico de Estados Unidos.

En el caso de España, la industria siderúrgica también se verá afectada por los aranceles del 25% que impuso Trump al acero. Según los datos de la Unión de Empresas Siderúrgicas (Unesid) de España, el año pasado nuestro país exportó acero y productos derivados a Estados Unidos por valor de 371 millones de euros.

Desde Unesid cifran en 250.000 las toneladas que anualmente colocan en el mercado estadounidense de media, "lo que representa el 3,3% de nuestras exportaciones siderúrgicas", recuerdan.

En un comunicado de la patronal siderúrgica española, al que ha tenido acceso elEconomista.es, reivindican "la importancia de una Europa fuerte y unida" que esté preparada para hacer frente a "negociaciones difíciles y proteger sus propios intereses".