
CaixaBank Research eleva al 2,4 % su previsión de crecimiento del PIB para 2024, marcando un ajuste significativo respecto a su proyección anterior del 1,9 %. Este incremento refleja un inicio de año robusto y un contexto global algo más favorable, según se detalla en el informe mensual por el servicio de estudios de la entidad financiera. La revisión al alza está respaldada por un sólido crecimiento en el empleo y la demografía, factores que han contribuido a un aumento en la renta bruta disponible en los hogares, que avanzó un 11 % en 2023, superando el promedio histórico del 8,2 %.
Los economistas de CaixaBank Research destacan que estos "buenos datos" del primer trimestre del año han sido determinantes para la actualización de sus previsiones, anticipando que la demanda interna jugará un papel crucial como motor de crecimiento, en detrimento de la demanda externa. Además, el informe subraya la importancia de abordar el desafío de la productividad, clave para mantener un ritmo de crecimiento sostenible a medio plazo.

En términos de inflación, CaixaBank Research ajusta su previsión para 2024 al 3,2 %, ligeramente por encima de las expectativas anteriores, debido a una evolución menos favorable de los precios de los alimentos y al aumento del IVA sobre la electricidad. En cuanto al mercado laboral, se espera una disminución en la tasa de desempleo, situándose en un 11,6 % de media anual en 2024 y en un 11,1 % en 2025, mejorando las estimaciones previas.
La inversión también se espera que crezca, con un incremento del 2,5% en 2024, favorecida por la reducción de los tipos de interés y el avance en la ejecución de los fondos europeos Next Generation EU, cuyo desembolso máximo se espera para 2025. En cuanto al empleo, las previsiones indican una reducción de la tasa de paro al 11,6% en 2024 y al 11,1% en 2025, gracias a la revisión al alza del PIB y el buen comportamiento del mercado laboral.
Sector inmobiliario
Respecto al sector inmobiliario, se proyecta un aumento del 4% en el precio de la vivienda, con previsiones de ventas que superan las 565.000 unidades para 2024, impulsadas por condiciones financieras favorables y una demanda robusta.
No obstante, los investigadores también ponen de relieve que la brecha de riqueza entre jóvenes y mayores se ha acentuado en los últimos 20 años, principalmente debido al mercado de la vivienda. La proporción de jóvenes propietarios de una casa ha disminuido significativamente del 66% en 2002 al 31,8% en 2022, y el valor mediano de sus viviendas ha caído en comparación con el de los mayores. En términos de activos financieros, los jóvenes han mostrado una capacidad de ahorro reducida, con depósitos en cuentas de pago aumentando solo marginalmente de 2.120 euros en 2002 a 3.270 euros en 2022, mientras que para los mayores de 75 años, estos depósitos casi se han sextuplicado.
A pesar de una caída generalizada de la deuda de los hogares desde 2010, los jóvenes han reducido considerablemente su deuda hipotecaria, con solo el 20,6% de los menores de 35 años teniendo hipotecas en 2022, un descenso de 24,4 puntos porcentuales desde 2002. La carga financiera de los jóvenes también ha disminuido, pasando del 15,5% de sus ingresos en 2020 al 12,1% en 2022.
Aunque la disminución de la deuda ha fortalecido la posición financiera de las familias en general, la brecha generacional sigue ampliándose. Los jóvenes enfrentan mayores dificultades para adquirir propiedades y una capacidad de ahorro más limitada, lo que contribuye a una creciente desigualdad en la riqueza entre generaciones.
Recuperación modesta en la eurozona
En el contexto europeo, CaixaBank Research describe la recuperación de la eurozona como "modesta", con un crecimiento esperado que no superará el 0,4% intertrimestral durante lo que resta de 2024. La entidad mantiene su pronóstico de política monetaria, anticipando varias reducciones de tipos que podrían favorecer la recuperación de la inversión en los próximos años. Ha basado sus previsiones en la "reactivación" del consumo privado en la segunda mitad del año -ha calificado de notable el colchón de ahorro con el que cuentan las familias- y al dinamismo del mercado laboral. Este aumento del consumo de las familias ha llevado la tasa de ahorro al 11,7%, por encima del promedio histórico del 8,2%.
Además, los flujos migratorios y el gasto de turistas internacionales podrían superar las expectativas. Sin embargo, los riesgos geopolíticos, como una posible escalada del conflicto en el Próximo Oriente, podrían encarecer el petróleo y revertir la moderación de la inflación, afectando negativamente a la economía.
Igualmente, en cuanto a la política monetaria, mantiene la previsión de cuatro bajadas de tipos en 2024 y de tres más en 2025, por lo que cree que "favorecerá la recuperación de la inversión".