
Pese a la polémica y la oposición generada por el acuerdo entre el PSOE y Junts x Cat, que marca la creación de una futura Ley de Amnistía y sienta las bases para un referéndum de autodeterminación en Cataluña, la formación que lidera Carles Puigdemont no ha garantizado todavía su apoyo a los próximos Presupuestos Generales de Estado (PGE). El acuerdo con los independentistas, que dejó este domingo manifestaciones contrarias en las principales de España, no pasa por apoyar incondicionalmente las próximas cuentas públicas, en contra de lo esperado por la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que hace semanas vinculó los apoyos para la investidura con el visto bueno a los PGE.
Así lo ha evidenciado este domingo Jordi Turull, secretario general de Junts, en una entrevista para La Vanguardia. Turull defiende que los compromisos que se asuman en el futuro entre socialistas e independentistas serán "ante la figura del verificador". Entre esos avances pueden estar, por ejemplo, determinados cumplimientos del Ejecutivo si quiere aprobar los presupuestos. "Si no se cumple, hay un mediador que da fe de ello y quedamos libres de apoyarlos", ha remarcado el número dos del partido soberanista.
Las palabras de Turull chocan frontalmente con la idea defendida hasta el momento por los miembros del Gobierno en funciones, que hacían extensible este apoyo a un sí a las cuentas públicas. Sin ir más lejos, el pasado 20 de septiembre la ministra de Hacienda y Función Pública en funciones, María Jesús Montero, se mostró convencida de que el Gobierno podrá aprobar a tiempo los Presupuestos Generales del Estado de 2024 tras la investidura de Pedro Sánchez. "Si se produce pronto la investidura del presidente, llevaremos el proyecto de presupuesto a la Cámara. Los tiempos son muy ajustados, pero en cualquier caso tendremos presupuestos para el año 2024", dijo Montero.
Recorte a la solidaridad
A la incertidumbre sobre el apoyo de los soberanistas a las cuentas públicas se suman sus exigencias. En este sentido, Natalia Mas, consellera de Economia de la Generalitat, ha dejado claras sus pretensiones en materia económica, principalmente en lo que respecta al sistema de solidaridad, para que Cataluña pueda recaudar todos los impuestos y contribuir con una determinada cuota al Estado, pero que esta sea "bien entendida".
En este sentido, Mas ha apuntado que en el sistema alemán y de estados como Massachusetts y California (Estados Unidos) los rangos de solidaridad están entre el 2% y el 4% del PIB, mientras que Cataluña se sitúa casi en el 10% del PIB de déficit fiscal. "La solidaridad puede situarse entre el 2 y el 4% del PIB, no en el 10% actual", ha defendido. Respecto a la condonación de la deuda pactada entre PSOE y ERC, la consellera de Economia ha señalado que los ahorros servirán para impulsar nuevos proyectos y "por lo tanto, tendrá un impacto positivo para Cataluña".