¿A quién no le gustaría jubilarse? Evidentemente, para gustos los colores, pero es prácticamente imposible mirar sin cierta envidia a las personas que, una vez han completado su carrera laboral, se convierten en pensionistas y disfrutar de un más que probable merecido descanso. Eso sí, no todos podrán hacerlo al mismo tiempo.
En España no hay una edad única de jubilación desde que en 2013 comenzase a aplicarse la reforma de las pensiones aprobada en 2011 y que, entre otras muchas cosas, se propuso retrasar la edad de jubilación a fin de hacer el sistema de pensiones español más sostenible.
Desde ese momento entró en juego una variable: la cotización. A partir de 2013 la cotización previa marcó la edad de jubilación de un trabajador: mayor cotización, más opciones de jubilarse antes.
El procedimiento es sencillo: desde 2013 y hasta 2027 se aumenta anualmente la edad de jubilación en el caso de trabajadores que no llegan a un nivel concreto de jubilación que también se incrementa cada año. Las personas que sí llegan a esa cifra pueden jubilarse a la edad previa a la reforma: a los 65 años.
Por eso, lo normal es preguntarse a qué edad nos podremos jubilar en función de los años cotizados. Por ejemplo, ¿a qué edad me puedo jubilar con 20 años cotizados?
Acudamos a la Ley General de la Seguridad Social: su disposición transitoria séptima (puede consultarla en este enlace) regula la 'aplicación paulatina de la edad de jubilación y de los cotizados' y dice lo siguiente para 2024:
- La edad de jubilación es de 65 años cuando el trabajador llegue a 38 años cotizados.
- La edad de jubilación es de 66 años y seis meses cuando el trabajador no llegue a 38 años cotizados.
Atendiendo a estas claves, los trabajadores con 20 años cotizados tendrán que esperarse a los 66 años y seis meses para jubilarse en 2024.
Qué pensión le queda a una persona que se jubila con 18 años cotizados
Es necesario cumplir con las premisas del método de cálculo de las pensiones de jubilación de la Seguridad Social, que tiene en cuenta el número de años cotizados y las bases de cotización mantenidas durante ese periodo de tiempo. Hay dos partes:
- Calcular la base reguladora del trabajador, que se consigue sumando las bases de cotización de los 300 últimos meses (25 años) y dividiendo el importe entre 350. En este cálculo se permite a los trabajadores beneficiarse de la integración de lagunas para rellenar con bases ficticias los periodos sin cotizar (salvo autónomos y empleadas de hogar) y la Seguridad Social aplica coeficientes a todas las bases excepto las de los dos últimos años para reflejar el efecto de la inflación.
- Calcular el porcentaje de la base reguladora. Esto depende de los años cotizados: por los primeros 15, el mínimo exigible, se concede el 50%, por cada uno de los siguientes 49 meses se concede un 0,21% extra y por cada uno de los siguientes 209 meses se concede un 0,19%.
Usando estas herramientas se obtiene el importe de una pensión de jubilación para un trabajador que se jubila con 20 años cotizados: el 62,38% de la base reguladora.
