El Índice de Precios de Consumo (IPC) registra su quinto retroceso consecutivo en diciembre. Según el dato adelantado que publica hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE), la inflación se sitúa en el 5,8% interanual, un punto por debajo del nivel del 6,8% de noviembre y la cifra más baja desde noviembre de 2021. La inflación subyacente (que excluye alimentos no elaborados y energía, más volátiles) sí prosigue su escalada y repunta seis décimas, al 6,9%.
Si algo destaca de la publicación de hoy es que la inflación subyacente no superaba en tanto (1,1 puntos) al índice general desde octubre de 2020. Además, no se colocaba por encima del índice general desde febrero de 2021.
Habrá que esperar al día 13 de enero -cuando el organismo estadístico publique su confirmación- para ver el detalle de los precios, aunque de la nota de hoy se extrae que la caída se debe a los descensos en electricidad y combustibles.
Los precios de la electricidad suben menos que en diciembre de 2021 y los carburantes registran un descenso mayor que el del año pasado. Por su parte, destacan, aunque en sentido contrario, el vestido y calzado, cuyos precios disminuyen, pero menos que en diciembre de 2021, y el aumento de los precios del tabaco y los alimentos elaborados.
En tasa mensual, los precios de consumo registran en diciembre un avance del 0,3% respecto al mes de noviembre, según el indicador adelantado del IPC.
La inflación subyacente se encuentra en niveles históricos desde el pasado mes de julio, y no ha bajado del 6%, por lo que hay que remontarse a 1993 para ver una tasa similar. En opinión de los analistas, podría seguir al alza, ya que la subida lleva "varios meses de retraso". Por su parte, el índice general sigue moderándose desde el máximo de julio, cuando escaló hasta el 10,8%, su nivel más alto desde septiembre de 1984.
Rebaja del IVA
El incremento de los precios comenzó con las materias primas y energéticas, pero se ha ido generalizando a toda la cesta de consumo. Con la confirmación del día 13 de enero se podría medir la evolución, pero en noviembre la ralentización en la subida de los precios seguía sin reflejarse en los alimentos, que volvieron a marcar un récord tras encarecerse un 15,3%.
Para paliar los efectos de esta subida en los hogares, en gobierno anunció el pasado martes dentro de su tercer paquete anticrisis una rebaja del IVA de los alimentos. Así, se suprime el IVA de "todos los alimentos de primera necesidad", que pasan del 4% al "0%" (pan, huevos, frutas, verduras, legumbres, patatas, cereales...) Además, el IVA del aceite y la pasta pasará del 10% al 5%.
Quedan fuera de la rebaja la carne o pescado, a pesar de que este último fue uno de los productos que primero entraron en la quiniela.
El Banco de España, en su informe "Evolución reciente de la inflación subyacente en el área del euro y en España", apunta a un factor como clave en esa subida imparable del IPC subyacente: la reapertura completa de la economía tras la pandemia, que "ha impulsado de manera intensa la movilidad y la demanda de los servicios de mayor contacto social".
El estudio destaca que esta situación se produce, además, en un "contexto de notable acumulación de ahorro de las familias y una mejora del mercado de trabajo", lo que fomenta el consumo de los hogares.