Valencia
El fuerte incremento de los precios de la energía y la ola de la inflación se han comido el tradicional saldo comercial y han provocado una situación inédita para la economía valenciana durante los últimos años. Entre enero y agosto de este año las compras al exterior han superado a las ventas valencianas a otros países en 48 millones de euros, de forma que la balanza comercial se sitúa en negativo. Sólo en agosto las exportaciones supusieron casi 430 millones más que lo exportado.
Como se veía venir, pese a que las exportaciones han acumulado un crecimiento en lo va de año del 26%, el rimo del alza de las importaciones ha sido muy superior, del 41,8%, con un gran protagonista: el sector energético. Las importaciones de petróleo y gas se han duplicado con respecto al mismo periodo del año anterior, por los efectos de la subida de precios, hasta 3.442 millones de euros.
Pese a que también las ventas vinculadas a energía se han doblado por ese efecto, debido a las exportaciones de producto refinado desde BP en Castellón y gas de la regasificadora de Sagunto, su volumen apenas representa la mitad del importado.
Ni siquiera la subida del sector del automóvil pese a los problemas de componentes de Ford en Almussafes, cuyas exportaciones crecieron un 36% y que sigue siendo uno de los segmentos con saldos positivos, evita esta situación. El principal baluarte de la balanza comercial valenciana ahora mismo es el de las semimanufacturas no químicas, que incluye al azulejo, un sector que ya ha dado la voz de alarma por su situación por los costes del gas. Otro de los baluartes tradicionales, el agroalimentario, logra crecer un 14%, pero sus importaciones se disparan casi un 29%. Sectores tradicionales como el mueble o el juguete están en saldo negativo.
Por países
Por países, uno de los grandes beneficiados ha sido Estados Unidos, que casi duplica el valor de sus ventas a la región aunque el saldo con el gigante norteamericano sigue siendo ligeramente favorable para la región. China las incrementa casi un 50%, hasta 4.204 millones de euros en el acumulado, con más 3.800 millones de saldo a su favor.
Aunque con volúmenes mucho más inferiores, es llamativo el incremento de Brasil que más que triplica sus exportaciones a la región. También resulta llamativo el incremento de Argelia en importación, cuando las exportaciones a ese país están en negativo tras la crisis diplomática y comercial.
