
Los españoles –excluyendo a navarros y vascos que están fuera de la Hacienda estatal– incrementaron su patrimonio en objetos de arte y antigüedades un 8,7% entre 2019 y 2020, según los últimos datos de la Agencia Tributaria.
En el año de la pandemia, los declarantes del Impuesto de Patrimonio (aquellos con posesiones superiores al millón de euros) han declarado que el valor en arte conjunto de los coleccionistas españoles rondó los 727,6 millones, frente a 669,5 millones de euros del ejercicio fiscal anterior.
83 personas más que en 2019
Según la reciente publicación de la liquidación del Impuesto de Patrimonio correspondiente a 2020, la Agencia Tributaria cuantifica en 1.082 las contribuyentes que declararon tener obras de arte y antigüedades por un valor medio de 672.451 euros. Aunque hay 85 contribuyentes que reconocen un patrimonio artístico medio de 4,9 millones.
Lo que arroja un incremento respecto al ejercicio anterior tanto en el número de personas con patrimonio artístico, como por el valor medio de su colección. Así, en 2019 la Agencia Tributaria controlaba a 999 personas (83 menos que en 2020) que reconocieron poseer este tipo de bienes por un valor medio de 670.124 euros (2.327 euros menos que en 2020).
Más del doble
Si nos retraemos diez años atrás, el valor medio de las colecciones artísticas no ha variado mucho, pues según la estadística fiscal de aquel año, era de media 627.924 euros. Sin embargo, lo que se ha disparado es el número de personas que reconocen ante Hacienda tener arte: 479 frente a los 1.082 del pasado 2020, más del doble.
Unas cifras muy superiores a las declaradas en el otro bien suntuario de obligada declaración en Patrimonio: joyas , pieles de carácter suntuario, embarcaciones, vehículos y aeronaves. En 2020 hubo 28.286 contribuyentes que declararon poseer este tipo de bienes por un valor conjunto de 1.038 millones de euros con un valor medio por contribuyente de 36.698 euros.

Lo que supone el 11,4% de incremento sobre los 934,5 millones de euros en el valor declarado en 2019. En ese año, el valor medio en joyas y otros bienes suntuarios fue de 34.018 (2.680 euros menos que en la liquidación de 2020).
Total bienes suntuarios
Sumando ambas partidas, los bienes suntuarios de los españoles –salvo los residentes en las comunidades con fiscalidad foral propia– contabilizaban en Hacienda un valor de 1.765 millones de euros, un 10,3% más que 2019 que sumó 1.600 millones de euros.
La estadística anual del Impuesto hace distingos según sexos, con un claro sesgo a favor de los varones, propietarios del 65,7% de los bienes suntuarios reconocidos en 2020 (1.159 millones de euros). Por su parte, las mujeres tienen el 34,4% de los bienes suntuarios en España (606 millones).
Un 0,23% del patrimonio total
Una proporción que varía también si se analiza el peso de estos bienes sobre el total del patrimonio de los contribuyentes obligados a presentar la liquidación del impuesto. En conjunto, sumando hombres y mujeres, los bienes suntuarios suponen tan solo el 0,23% del total del patrimonio, con una preponderancia del capital mobiliario (74%) o los bienes inmuebles (19,8%). Sin embargo, en el caso de los varones el peso de los bienes suntuarios se eleva al 0,26% del total de patrimonio declarado y se reduce a un 0,19% en las mujeres.
Aunque la obligación de presentar la liquidación del Impuesto de Patrimonio varía en cada comunidad autónoma –que tienen cedido este tributo con potestad legislativa– por lo general deben hacerlo los contribuyentes cuyos bienes superan los 700.000 euros más 300.000 en inmuebles.
En conjunto, en 2020 presentaron la declaración 218.992 contribuyentes que declararon en conjunto un patrimonio por valor de 768.517 millones de euros lo que arroja un capital medio de 3,51 millones de euros por declarante, según Hacienda.
Sin embargo, esta media varía por comunidades autónomas, aunque esta diferencia se explica en gran medida por los límites establecidos por cada administración comunitaria. Los datos publicados por la Agencia Tributaria marcan un máximo en la Comunidad de Madrid donde presentaron 19.508 personas la liquidación (aunque están exentas del pago por tener una bonificación del 100%) con un patrimonio medio de 10,34 millones de euros.
Muy lejos de los 14.812 contribuyentes asturianos que declararon un patrimonio medio de 1,73 millones de euros. Cataluña es con diferencia la región donde más personas tributan por este impuesto, 82.465, con un patrimonio medio declarado de 2,7 millones.
Fundaciones y empresas
No obstante, los datos que contabiliza la Agencia Tributaria no reflejan el patrimonio artístico particular que realmente existe en España, sólo aquello que se declara en este impuesto y, por tanto, el propietario es una persona física. Son pues coleccionistas a título personal.
Sin embargo, el grueso de las grandes colecciones privadas en España y en otros países se canaliza a través de fundaciones, ligadas en muchas ocasiones a grandes fortunas. Algo que queda fuera del control del Impuesto de Patrimonio, pues la titularidad de este patrimonio artístico corresponde a entidades corporativas, bien Fundaciones o directamente empresas o bancos.
Pero a diferencia de las colecciones meramente particulares, registradas como patrimonio de una persona física con nombre y apellidos, la de las fundaciones y las empresas están generalmente abiertas al público que puede disfrutar de ellas. Incluso algunas, como la Thyssen, se ha convertido en un museo.