
El rebote bursátil de 2021 disparó los ingresos de los principales empresarios de Estados Unidos. La mayoría de los CEO norteamericanos inflaron su salario un 12% el pasado año, frente al 4,5% de subida que disfrutaron de media el grueso de los trabajadores de ese país.
La mediana de ingresos de los ejecutivos fue de 14,7 millones de dólares, aunque con grandes diferencias entre ellos, según un análisis de The Wall Street Journal sobre 425 empresas que pertenecen al índice bursátil S&P 500.
El directivo que más ganó fue el jefe de Expedia, el comparador de viajes, con una retribución de 296 millones de dólares. Le siguieron los CEO de Warner Bros (246 millones) y ServiceNow (165 millones).
Pero la lista de salarios no sorprende por quienes están en su top, sino por quienes están en lo más bajo. Elon Musk, jefe de Tesla, The Boring Company y Space X -y aspirante a hacerse con Twitter- recibió 0 dólares como compensación por su trabajo en 2021. Algo más ingresó Warren Buffett, el aclamado inversor y dueño del fondo Berkshire Hathaway. De esta empresa solo recibió 100.000 dólares en salario y 273.204 en concepto de vivienda y seguridad personal.
De los más de 400 CEO analizados, estos dos fueron el oro y la plata de los peor pagados. Elon Musk lleva dos años sin cobrar, pese a que Tesla ha multiplicado su valor en Bolsa por ocho en desde enero de 2020, aunque el Journal recuerda que en 2018 recibió como pago un paquete de acciones valorado entonces en 2.300 millones de dólares del fabricante de coches. Hasta ahora Musk se ha hecho con 11 de los 12 tramos de opciones sobre acciones incluidos en ese paquete, cuyo valor actual asciende a 65.000 millones de dólares.
El sueldo de Warren Buffett tampoco sorprende teniendo en cuenta que lleva 40 años con su salario congelado en los 100.000 dólares, y que solo varía según los pagos en especie. El año en que más cobró fue en 2010, cuando recibió 525.000 dólares: 75.000 dólares en honorarios por dirección y 350.000 en seguridad, además de los 100.000 habituales.
El escueto ingreso de Buffett coincide con su estilo de vida austero, ya que ha vivido toda su vida en una casa unifamiliar que compró hace 70 años por apenas 31.500 dólares y que puso a la venta hace menos de dos meses por 800.000 dólares, una minucia comparada con los 110.000 millones de dólares que posee en forma de acciones.
Otro de los destacados por su escueto salario -en el cuarto puesto por abajo- fue el CEO de Activision Blizzard, el desarrollador de videojuegos que fue adquirido por Microsoft en enero de 2022 por casi 70.000 millones de dólares. Bobby Kotick ganó el año pasado 826.000 dólares pese a allanar el terreno para la mayor adquisición de la historia del sector.
La escasa compensación, que contrasta con los 155 millones de dólares que ganó en 2021, está relacionada con el escándalo sexual en el que la compañía lleva años sumergida, acusada formalmente de tener una cultura interna de acoso a las empleadas. Sin embargo, la venta de Activision podría catapultar a Koticks al número uno de la lista de ejecutivos mejor pagados, ya que si es despedido o renuncia a su puesto de aquí a un año recibirá 14,4 millones de dólares.
Además, posee 4,3 millones de acciones y tiene derecho a comprar otros 2,2 millones, por un valor total de 520 millones de dólares. Sin embargo, la venta del desarrollador está a la espera de ser aprobada por el regulador, y se espera que ocurra en primavera del próximo año.