
Pese a su distinto color político, la Generalitat Valenciana que preside el socialista Ximo Puig y la Junta de Andalucía del popular Juan Manuel Moreno, unirán sus voces en el próximo Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF). Un encuentro vital para decidir el reparto de los 13.486 millones de euros del fondo extraordinario Covid destinado a las autonomías este año.
Ambas comunidades plantearán que un tramo de ese dinero se destine a compensar a las comunidades peor financiadas, según acordaron ayer el consejero valenciano de Hacienda, Vicent Soler, y su homólogo andaluz, Juan Bravo.
La propuesta que llevarán al CPFF es que esa parte se dirija a eliminar las diferencias de financiación por habitante ajustado de las regiones infrafinanciadas con el sistema actual, de forma que puedan igualar su financiación a la media de las comunidades autónomas este año.
Según su iniciativa, una vez asignada esta partida, el resto de los fondos debería distribuirse en proporción a la población ajustada de las CCAA. Junto a Comunidad Valenciana y Andalucía, los dos consejeros incluyeron a Murcia y Castilla-La Mancha en el grupo de regiones infrafinanciadas.
Con este instrumento transitorio buscan compensar en la práctica los menores ingresos del actual sistema, debido a la dificultad a corto plazo para lograr un acuerdo para un nuevo modelo de financiación autonómica. Soler recordó que con el actual esas diferencias en algunos casos llegan hasta los 30 puntos por habitante ajustado.
Encuentro de presidentes
Además, el encuentro entre los dos consejeros de Hacienda autonómicos ha servido para plantear cuestiones técnicas de cara a la reunión prevista entre los dos presidentes autonómicos en septiembre. Precisamente el objetivo de esa reunión entre Puig y Moreno es tratar de fijar una postura común para la negociación del nuevo sistema de financiación autonómica, en que ambas autonomías comparten posiciones similares.